Mucha informática, poco inglés

¿Qué quieren los empresarios de un universitario, aparte de un tipo de carrera específico? Sorprenden algunas respuestas de los casi 1.400 empresarios entrevistados por la oficina de empleo de la Universitat de València. Por ejemplo, hay una preocupación relativamente baja por los idiomas, y es, en cambio, alta la referida a los conocimientos de informática.

Cuando un empleador oferta un puesto de trabajo, en todo caso, puede suceder como con las cartas a los Reyes Magos, que se empiece a pedir infinidad de cosas, y que el receptor en cuestión dude cuáles priorizar ante la ingente demanda. También para orientar sobre qué deben potenciar los trabajadores advenedizos, el OPAL de la Universitat de València ha preguntado a los empleadores de titulados de la provincia de Valencia.

En opinión del director del Observatorio, José María Peiró, el reto mayor de las universidades pasa por asumir que las empresas no solo valoran las competencias específicas, es decir, aquellas referidas a la carrera, sino que también miden las transversales, las que no van unidas a la disciplina estudiada, y las instrumentales (idiomas e informática), por lo que las universidades deben procurar esta información integral para colocar laboralmente a sus titulados.

Flexibilidad horaria

Las características más valoradas por los empleadores son los conocimientos de informática, la experiencia previa específica de su ámbito profesional, la titulación, la disponibilidad para la flexibilidad horaria, haber realizado prácticas y la experiencia laboral en general. Como todas éstas, que los empleadores evalúan por encima del 8 sobre 10, están también competencias de carácter genérico como la capacidad para solucionar problemas, la asunción de responsabilidades, el trabajo en equipo y la planificación y gestión de recursos, sin olvidar, por supuesto, el dominio de la titulación.

Lo que menos relevancia tiene, según el estudio, son los conocimientos de idiomas: el inglés (6,3) y el valenciano (6,2). En el caso del inglés podía deberse a que solo el 13,7% de las 1.150 empresas consultadas tienen implantación internacional. Los idiomas, en cambio, son muy valorados en sectores como la industria, la hostelería, los transportes y la educación, donde se valoran significativamente más que en el resto de sectores. Asimismo, los conocimientos de valenciano son más valorados en los titulados universitarios de la Administración pública y del sector educativo.