El sector de Pérez se apresta a la pelea

Después del mazazo recibido hace una semana, los colaboradores de Juan Ignacio Pérez en el equipo rectoral de la UPV se han rehecho anímicamente y no están dispuestos a dar nada por perdido. "No vamos a tirar la toalla, nada está decidido", afirma un vicerrector. Esto no significa que Pérez vaya presentarse a las nuevas elecciones, algo que se da prácticamente por descartado, sino que la sensibilidad que el sector representa en el seno de la UPV va a jugar sus bazas para tratar de dirigir el futuro equipo rectoral.

"Todavía es muy pronto para anticipar qué va a pasar. De momento", añade el vicerrector, "vamos a analizar qué ha pasado y a realizar la autocrítica que haya que hacer". El triunfo del "no" en las elecciones del día 22 ha trastocado los proyectos de gestión y personales del equipo del rector, que se tiene que adaptar a una situación "imprevista". Sus integrantes, sin embargo, rechazan estar de forma interina en las cargos que ocuparán hasta que se celebren los nuevos comicios, previsiblemente a finales de año.

El primer apunte autocrítico en el que coinciden es no haber sabido prever y neutralizar los riesgos que entraña el "diabólico" procedimiento de elección establecido en la Ley Orgánica de Universidades (LOU) cuando se presenta un único candidato, que favorece el voto cruzado negativo contra él. "Fue un castigo gratuito que perjudica también al conjunto de la Universidad, una moción de censura destructiva y sin candidato alternativo", describe un colaborador de Juan Ignacio Pérez. Otros lamentan no haber sido "un poco maquiavélicos" para conjurar ese peligro. Por ejemplo, favoreciendo que pudiera presentarse el catedrático Antonio Vera, el candidato solitario que vio frustrada su intención de competir con Pérez por no disponen de suficientes avales y miembros para su equipo.

También se reconocen errores en la gestión de los complementos del personal docente e investigador y, especialmente, haber aparecido ante la comunidad universitaria como un equipo rectoral "entregado" al Gobierno vasco, cuando ha habido, afirman, choques importantes con el Departamento de Educación. Sin embargo, se rechaza enérgicamente el reproche de la radicalidad en la euskaldunización. "Eso es directamente una mentira", replican.

Aunque "todo está abierto" en estos momentos y no se excluye la posibilidad de entrar en una candidatura amplia que fuera "realmente de consenso"; lo que sí se descarta es la retirada. Sobre todo si es para dejar libre el paso al sector que aglutina CC OO, que se ha convertido en el principal detractor del equipo rectoral y se prepara ya para disputar el Rectorado. En ese caso, se asegura que desde el entorno de Juan Ignacio Pérez se promovería una candidatura para aglutinar a los sectores y sensibilidades universitarios que se han visto representados en el actual rector.