"No me planteo límites si las cosas se hacen desde el cante flamenco"
Una de las facetas menos conocidas de Picasso, su labor como poeta, sirve de inspiración a Enrique Morente en su inminente nuevo disco, Pablo de Málaga. El cantaor granadino entona 13 poemas surgidos de la mente y el puño del genial pintor, 13 textos sobre los recuerdos de su infancia en su ciudad natal, y los acompaña con grabados inéditos en un trabajo autoeditado que llegará a las tiendas el 10 de junio, cuatro días antes de su presentación en Gernika.
Pregunta. ¿Por qué dedica un álbum a Pablo Picasso?
Respuesta. Principalísimamente, por la emoción que me produjo ver los bocetos del Guernica en el Caserón del Buen Retiro, en Madrid. Esa mujer de boca abierta con expresión desesperada y tremenda me emocionó muchísimo, me recordó a las abuelas de Irak y de cualquier lugar donde se produce un genocidio.
"No me gusta ser un andaluz narciso enamorado de la tierra"
"Si no hay un patrocinador hoy no puedes hacer cine, música ni teatro"
P. ¿El disco engloba una finalidad más allá del puro entretenimiento?
R. Claro. Esencialmente, denunciar las atrocidades que todavía comete el ser humano, que siguen existiendo gernikas y que tenemos que luchar para que algún día el ser humano se de cuenta de que no puede continuar cometiendo genocidios.
P. ¿Un disco puede ayudar en algo?
R. Esa es la ilusión, pero muchas veces nos damos cuenta de que estamos en el terreno de la utopía.
P. Alguien esperaría un estreno en Málaga. ¿Por qué lo presenta en Gernika?
R. Resulta que Pablo de Málaga, por encargo de la República, pintó un cuadro que es universal y se llama Guernica. Y el tema principal del disco se llama Guern-Irak. Por el sentimiento con que está hecho, me parece idóneo que se haga en la ciudad donde algún día debe habitar ese cuadro.
P. ¿Picasso era tan genial en el campo de la literatura como con los pinceles en la mano?
R. No. Es un genial pintor al que le gustaba escribir. Son poemas escritos con una mentalidad muy anticonvencional, muy cubista y sin pretensiones de ser el Picasso de las letras. Escribía con mucha gracia, libertad y talento, y me seduce el gracejo de sus expresiones y la facilidad para pasar de un tema a otro en cuatro sílabas.
P. Al margen del apartado lírico, también habrá intención de sorprender con la música.
R. Desde luego. Mi parte creativa es musicar estos poemas y darles una credibilidad como flamenco. En ese aspecto, no me planteo límites siempre que las cosas se hagan desde el cante flamenco, que es lo que yo hago. El momento, la obra, la inspiración es lo que me dice lo que tengo que hacer, dónde está el límite o la dirección.
P. Ha reeditado Omega por su cuenta y Pablo de Málaga también es una autoproducción. Se ha convertido en empresario.
R. Claro, nos vamos pasando al capitalismo, ja, ja. La industria discográfica atraviesa una metamorfosis, y a los músicos con intención de creatividad nos tiene un poco cogidos por los mismísimos orificios de la nariz. Y hay que seguir, hay que adaptarse a los tiempos y lograr que continúe la creación.
P. Sus últimos discos temáticos los dedica a artistas y a espacios andaluces, a Lorca, a La Alhambra y a Picasso. ¿Cuestión de paisanaje?
R. No. Yo he cantado a poetas andaluces como Neruda y Lorca, pero también a San Juan de la Cruz, a León Felipe y a autores mexicanos. No me gustan los chauvinismos, no me gusta ser un andaluz narciso enamorado de la tierra.
P. Las presentaciones del nuevo disco las patrocina una entidad financiera. ¿El patrocinio es la única manera de sacar hoy adelante ciertos proyectos?
R. Si no hay una entidad, un patrocinador o un amigo al que le haya tocado la lotería, desgraciadamente hoy no puedes hacer cine, música ni teatro. Casi ni puedes pintar.
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