Los grandes valores siguen tirando

Los mercados de valores europeos mantuvieron ayer la tranquilidad y la orientación alcista ante la ausencia de noticias importantes.

Las declaraciones del presidente de la Reserva Federal, Ben Bernanke, en las que acepta abiertamente la posibilidad de que la economía estadounidense se contraiga "ligeramente" en este primer semestre, cayeron en saco roto al afirmar segundos después que las actuaciones del banco reducirán los riesgos y que en el segundo semestre se notarán ya las medidas económicas y fiscales adoptadas.

Para los inversores, nada mejor en momentos de peligro que les recuerden que hay entidades de sobra para "hacer el quite" en caso necesario, algo que se ha confirmado repetidamente en las últimas semanas.

El Ibex 35 terminó la sesión con una subida del 1,02% y ya por encima de los 13.800 puntos, lo que provoca salidas de la inversión a corto plazo que, hasta el momento, se han cubierto bien con nuevas tomas de posiciones.

La situación del mercado es de un equilibrio complicado, sobre todo por moverse al alza en momentos de crisis. En estos momentos, el Ibex 35 cotiza un 13% por debajo de los máximos del pasado año, lo que parece poco descuento para un enfriamiento económico que no ha hecho más que empezar. Los más optimistas afirman, sin embargo, que el descuento importante se efectuó en enero, cuando este índice recortó el 23% en poco más de dos meses.

La contratación en el Mercado Continuo descendió respecto de la sesión anterior, hasta quedar en 5.714,86 millones de euros, de los que 4.003,49 millones procedían de las operaciones del "mercado abierto". Como en días anteriores, los tres principales valores acapararon gran parte de la liquidez del mercado, hasta acumular el 51% del total entre tres sociedades, Santander, Telefónica y BBVA.

La vuelta de la inversión profesional a la renta variable está resultando provechosa, aunque falta saber a qué plazo actúa.