El BNG alerta de que Rajoy traerá una "involución" en las libertades

El candidato del BNG al Congreso por A Coruña, Francisco Jorquera, dio ayer el portazo definitivo: el PP no gobernará España con el apoyo del nacionalismo gallego. Jorquera esgrime que los populares están "en las antípodas" ideológicas del Bloque y que su líder, Mariano Rajoy, "exhibe" una "gallegofobia" que "avergüenza" hasta a sus "ex votantes" de Galicia, un sentimiento agravado por el "silencio cómplice" de Alberto Núñez Feijóo.

De espaldas a ese PP que traerá una "involución" de derechos y libertades, el escenario postelectoral con el que sueña el Bloque es un PSOE necesitado de pactos. Tanto lo desean que ya tienen preparado el guión. Para lograr el apoyo del BNG, José Luis Rodríguez Zapatero deberá atender a una lista de diez demandas, en las que unas tendrán más peso que otras.

Un "asunto capital" para respaldar a los socialistas será el impulso a la construcción naval en Ferrol. El Bloque exigirá a un hipotético gobierno presidido por Zapatero que se levante la prohibición para que Navantia Fene construya barcos civiles. Los nacionalistas insisten así en una demanda que ya plantearon sin éxito a través de la Consellería de Industria. El no rotundo del Gobierno de Zapatero se escudó en el veto impuesto por la UE, pero Jorquera insiste en que con "voluntad política" ese obstáculo puede ser salvado.

La transferencia de las competencias de tráfico y salvamento marítimo, un mínimo del 8% del presupuesto estatal de infraestructuras, más cuota láctea, mayor control del voto emigrante y una agencia tributaria gallega serán también moneda de cambio en una posible negociación con Zapatero. Las conversaciones incluirán además que instituciones como el Tribunal Constitucional sean "plurinacionales", porque, ejemplificó Jorquera, "en un partido Madrid-Celta, el árbitro no lo puede designar el Madrid".