El soltero de oro de Google se casa

Los pocos solteros de oro que quedan en Estados Unidos viven casi todos ellos en Silicon Valley (California), el epicentro tecnológico del mundo. Son los jóvenes fundadores de compañías triunfadoras en Internet como Google o Facebook, muchos aún en la treintena y reacios a las cámaras. Además, de un tiempo a esta parte, parecen una especie en peligro de extinción: ahora les ha dado por casarse. El último en pasar por el altar ha sido Larry Page, de 34 años, fundador de Google y con una fortuna estimada en 13.600 millones de euros. La ceremonia tuvo lugar este fin de semana la isla caribeña de Necker, propiedad de otro multimillonario, el británico Richard Branson. Su esposa, Lucy Southworth, de 27 años, estudia informática biomédica en Stanford.

A pesar de los rumores, no asistió el matrimonio Clinton. Un portavoz de la empresa Google se negó a revelar detalles de los invitados, aunque según algunos tabloides el cantante de U2, Bono, se encontraba entre ellos.

En mayo de este año el otro cofundador de Google, Sergey Brin, se casó con Anne Wojcicki en las Bahamas. Su mujer es una experta en biotecnología graduada en la Universidad de Yale.