Touriño defiende a Fomento y echa en cara al PP la medalla a Cascos

El presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, salió ayer en defensa de la gestión de Magdalena Álvarez al frente del Ministerio de Fomento y la comparó con la de su antecesor en el cargo, el popular Francisco Álvarez-Cascos, máximo responsable político de la crisis del Prestige durante el mandato de Gobierno de José María Aznar.

Touriño aseguró que el mismo partido y los mismos dirigentes políticos que condecoraron a Cascos, "que en gloria esté", con la Medalla de Oro de Galicia no tienen ahora legitimidad alguna para reprobar la gestión de la actual ministra de Fomento.

Touriño respondió así al anuncio del PP de que presentará una propuesta para que el Parlamento de Galicia rechace la gestión de la responsable de las obras públicas del Estado, a la que acusa de retrasar "hasta 2020" el fin de las obras de construcción de la línea ferroviaria gallega de alta velocidad.

El PP reveló su intención de trasladar a la Cámara gallega la reprobación que perdió en el Congreso durante un debate parlamentario en torno al AVE en el que la conselleira de Política Territorial, María José Caride, mantuvo "la fecha comprometida de 2012" para la llegada del tren de alta velocidad a Galicia.

Caride y el portavoz del PP, Alejandro Gómez Alonso, polemizaron sobre los méritos de Magdalena Álvarez y el ex ministro popular Francisco Álvarez Cascos en sus respectivos mandatos con Galicia. El representante de la oposición censuró además la actitud del BNG de evitar que la ministra fuese reprobada en el Congreso.

Touriño recordó que los que ahora tratan de reprobar a Álvarez, "en una muestra de la más absoluta incoherencia y oportunismo", fueron los responsables de la "gestión nefasta" de la catástrofe del Prestige. Los mismos, subrayó, que cuando tenían bajo su responsabilidad el Gobierno central invertían en Galicia muy por debajo de sus necesidades.