Unidos por las elecciones separadas

Andalucía es la única comunidad autónoma de las cuatro que se constituyeron a través del artículo 151 de la Constitución -las otras tres son País Vasco, Cataluña y Galicia, que no celebra sus elecciones autonómicas en una convocatoria específica, sino que las hace coincidir con otras elecciones, habitualmente las generales, aunque también, como en el caso de 1994, con las europeas. Desde que en 1980 se proclamó la autonomía, sólo en dos ocasiones, en 1982 y en 1990, los comicios andaluces se han celebrado por separado.

Lo que para el PSOE es una forma de fomentar la participación no saturando al ciudadano con muchas convocatorias electorales poco espaciadas en el tiempo es para la oposición en bloque una forma de escamotear a los votantes un debate específico sobre los problemas de Andalucía. Ayer, los líderes regionales del PP, Javier Arenas; IU, Diego Valderas, y PA, Julián Álvarez, se unieron a la plataforma Andaluces por unas Elecciones Propias, y recogieron firmas en distintas ciudades para reivindicar que los comicios autonómicos se celebren en distinta fecha que los generales.

Los tres dirigentes de la oposición coincidieron en que la separación de las elecciones autonómicas es un factor fundamental para que Andalucía sea una comunidad "de primera". El debate sobre la separación electoral se trasladó ayer al Parlamento regional. La mayoría absoluta del PSOE impidió que prosperara una proposición de ley del PP para que la Ley Electoral andaluza establezca que la votación autonómica no pueda "estar comprendida entre el 1 de julio y el 31 de agosto ni coincidir con la que se fije para cualquier proceso electoral de carácter nacional".