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Columna
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Rompecabezas chino

El 'boom' capitalista de las ciudades se acelera y la riqueza de los más ricos aumenta rápidamente

En su reciente reunión, el G-7 afirmó que, en vista del incremento de la inflación y del superávit comercial, China debería acelerar la apreciación de su moneda. Las autoridades chinas, soberanas ellas, continuarán haciendo lo que crean más conveniente. Lo cual no está nada claro, porque la economía china es un verdadero rompecabezas.

China ha crecido a tasas por encima del 8% desde 1990. Recientemente este crecimiento se ha acelerado hasta el 11,5%, y la sospecha es que el verdadero ritmo de crecimiento sea superior al que indican las estadísticas oficiales. La inflación se ha acelerado, pasando de tasas marginalmente negativas en 2002-03 al 6,5% en septiembre del 2007. El veredicto está claro: es una economía recalentada con un claro peligro de inflación. No tan rápido. Si uno descompone la tasa de inflación entre inflación alimenticia y no alimenticia, se descubre que la inflación no alimenticia se ha mantenido estable alrededor del 1% (lógico, dada la gran cantidad de mano de obra disponible) y que toda la variación de la inflación se ha debido a la evolución de los precios de los alimentos. En 2007, el componente alimenticio del IPC ha aumentado un 18%, debido sobre todo a un aumento del 77% del precio de la carne de cerdo, el principal alimento chino.

Las señales de recalentamiento aparecen en otros lugares, sobre todo en el mercado bursátil. El índice de la Bolsa de Shanghai se ha apreciado un 115% en lo que va de año y un 400% desde enero del 2006, y China cuenta ya con varias de las mayores empresas mundiales por capitalización bursátil. El superávit comercial se ha acelerado y las reservas cambiarias ya superan los 1.400 millones de dólares. El banco central está tensionando la política monetaria -ha subido los tipos de interés dos veces en los últimos dos meses- pero los tipos de interés reales todavía son negativos debido a la alta inflación.

¿Por qué se le pide a China que acelere la apreciación del yuan, si se ha apreciado ya casi un diez por ciento desde su flotación? Porque esta apreciación ha sido solo contra el dólar -durante ese periodo el euro se ha apreciado contra el dólar un 20% y, por tanto, el yuan se ha depreciado contra el euro un 10%. No es de extrañar que la zona euro sea ya el principal destino de las exportaciones chinas y que el superávit chino con la zona euro sea ya mayor que con EE UU. Por tanto, las autoridades europeas han perdido la paciencia y reclaman que China adopte una flexibilidad similar con el euro.

El resultado de esta divergencia es que el yuan ha preservado la competitividad de las exportaciones chinas. Y éste es un objetivo fundamental de las autoridades chinas, cuya principal preocupación es garantizar la estabilidad social. La desigualdad está aumentando velozmente en China, a pesar del rápido crecimiento económico. La pobreza es todavía intensa en la China rural, acentuada por la falta de un sistema público de salud. Hay todavía 700 millones de campesinos que se dedican a actividades poco productivas y que viven con el miedo de enfermar y no tener dinero para pagar el hospital -el coste del sistema sanitario en China es prohibitivo, y los pacientes no son admitidos en los hospitales si no pueden pagar el tratamiento-; por tanto, muchos chinos viven con abundante dinero en efectivo en el bolsillo por si acaso caen enfermos. Por otro lado, el boom capitalista de las ciudades se acelera y la riqueza de los más ricos está aumentando rápidamente. Hay ya más de cien individuos con riqueza superior a los mil millones de dólares, comparado con 14 el año pasado y tan solo uno en 1999. El elogio de la riqueza de Deng Xiaoping se está materializando, y el sistema parece haberlo asimilado -muchos de los ricos son miembros del partido comunista, y varios de ellos eran delegados en el recientemente concluido Congreso del Partido Comunista Chino-.

China tiene que evolucionar hacia un modelo de crecimiento más equilibrado, con menor ahorro, menor consumo de materias primas y mayor protección del medio ambiente. Resolver este rompecabezas es una labor de chinos.

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