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El PCA excluirá de las listas a quien acuda a la cumbre crítica

El encuentro defiende la "soberanía" de IU frente a partidos y grupos

El encuentro convocado por sectores descontentos de IU para el día 20 en la localidad sevillana de La Luisiana, en defensa de la "pluralidad" de la formación, empieza a tener consecuencias. El secretario general del PCA de Sevilla, Juan de Dios Villanueva, advirtió ayer de que a la hora de confeccionar las listas de la doble cita electoral de marzo próximo "no serán propuestos" aquellos afiliados que acudan a la reunión crítica. "Se tendrá en cuenta, y no apoyaremos a quien vaya", sentenció Villanueva.

La convocatoria crítica tiene carácter andaluz y engloba a grupos de muy distinta procedencia: desde la corriente Convocatoria por Andalucía, cuyo referente es la portavoz parlamentaria, Concha Caballero, hasta sectores tradicionalmente oficialistas de Jaén o Málaga que han sufrido recientes expedientes y expulsiones. También tienen previsto asistir varios miembros de la CUT y afiliados y simpatizantes del mundo de la universidad y la cultura. El poeta Luis García Montero ya ha firmado el manifiesto que se leerá en el acto de la Luisiana, y que, en síntesis, reivindica la soberanía y vigencia de IU.

El documento se titula Izquierda Unida tiene futuro y expresa su "preocupación" por el "proceso de confrontación interna que atraviesa" la formación, al tiempo que anima a recuperar las ideas "olvidadas" como la "más amplia democracia interna". Los críticos echan en falta la pluralidad como componente esencial de la izquierda transformadora; la elaboración de una alternativa que no sea producto de "técnicos, cenáculos o fuerzas tuteladoras", sino que surja de la "elaboración colectiva". El párrafo que, sin duda, levanta más polémica, dice: "La Izquierda Unida que definimos tiene partidos y corrientes en su seno, pero es asamblearia, soberana en sus decisiones, sin que grupos, partidos o corrientes impongan o hegemonicen los procesos".

En efecto, el PCA se ha sentido concernido y ha interpretado esta reunión y su manifiesto como un ataque directo a su aparato. Según el secretario general de Sevilla, Juan de Dios Villanueva, el encuentro tiene un cariz claramente anticomunista: "Se ha vuelto al mensaje antipartido de decir que existe un poder excesivo del PCE. Ahí hay una línea roja que cuando se cruza debemos reaccionar". La reacción es un aviso a navegantes sin ningún tipo de disfraz: "Tendremos en cuenta quien va, y quien no, a la hora de elaborar las listas. Los afiliados del partido que estén allí [en la cumbre de La Luisiana] no serán propuestos. Cada uno es libre de hacer lo que quiera, pero no apoyaremos a quien vaya". Villanueva añadió en tono quejoso que algunos miembros de IU son "muy cariñosos" y animan al PCA "cuando hace fiestas, pero no cuando hace política".

El líder de los comunistas sevillanos opina que el encuentro se ha montado para apoyar al coordinador federal de IU, Gaspar Llamazares, que se bate con Marga Sanz, la apuesta del PCE, en unas elecciones primarias para elegir al candidato a la presidencia del Gobierno de la nación.

Varios comités provinciales del PCA se han pronunciado ya a favor de la candidatura alternativa, y el coordinador de IU, Diego Valderas, tiene la intención de convocar una reunión de la ejecutiva de la coalición para que se decante también por Marga Sanz. Este anuncio ha hecho saltar la polémica entre los sectores críticos, quienes interpretan que tal pronunciamiento quiebra el espíritu de las elecciones primarias.

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