Un cachete tumba a Dida

El portero del Milan protagonizó una de las escenas más melodramáticas, o más cómicas, de la jornada de Champions. Depende del ángulo desde el que se mire la irrupción de un espontáneo en el campo de Celtic Park. Si este muchacho de chándal blanco que agitaba sus manos abiertas llevaba veneno en la palma izquierda, Nelson Jesús Silva, Dida, está gravemente perjudicado. Si no, es un actor. Uno que sobreactuó lo que aparentemente fue una caricia, un roce, un cachete. Primero, Dida hizo ademán de perseguir al intruso. Luego se desplomó como un saco de arena. Se quedó tendido, como en estado de conmoción. Las consecuencias de una u otra posibilidad son profundas. La acción tuvo lugar en el minuto 92. El Milan perdía (2-1) sin remedio. Si la UEFA interpreta que hubo invasión de campo y agresión, y que, como consecuencia, un jugador quedó inhabilitado para seguir jugando, podría arrebatar los tres puntos al Celtic. Entonces el Milan ganaría una ventaja deportiva. Una ventaja que no logró con el balón en juego.

Dida fue retirado del campo en camilla por dos asistentes del Milan que le pusieron una bolsa de hielo en la cara. El portero abandonó la escena con los ojos cerrados. Como durmiendo. El árbitro pitó el final un instante después. El Celtic fue mejor que su rival. El equipo de Ancelotti atraviesa un bache. Es el campeón vigente y parece adormilado. Como su portero. Ayer no le bastó con el gol de Kaká para sacar el partido adelante. "El incidente no ha tenido nada que ver con el resultado", admitió Carlo Ancelotti, técnico milanista. "No sé si vamos a presentar una reclamación, pero no creo. No pienso que el partido deba volver a jugarse", cerró el técnico, quizás recordando al portero chileno Ricardo Rojas, que se autoinflingió un corte en la cara durante un Chile-Brasil de clasificación para el Mundial de Italia 1990 y logró que el partido se suspendiera al decir que se lo habían hecho los hinchas rivales al lanzar una bengala.

El Liverpool tampoco resolvió con éxito su partido. La derrota del equipo de Benítez resultó más sorprendente. Perdió ante el Marsella, un equipo que vive en posiciones de descenso en la Liga francesa. Marcó Valbuena (0-1) y los reds no consiguieron reaccionar. Malas noticias para el Liverpool. Y para Torres, que fue titular.

Dida: ¿agresión o cuento?