El Ayuntamiento de Vigo para una obra en el "núcleo de oro"
El edificio altera un entorno que aspira a monumental
El Ayuntamiento de Vigo paralizará hoy la construcción de un edificio de aparcamientos, comercios y viviendas en un patio interior de la plaza Compostela, en pleno centro de la ciudad. Las viviendas en este entorno, "núcleo de oro" del urbanismo vigués, se cotizan a unos 7.000 euros el metro cuadrado. La obra, en ciernes, podría reventar los propósitos del Plan Especial de Edificios a Conservar (PEEC).
Desde el pasado lunes están suspendidas cautelarmente en Vigo todas las licencias de obras en el centro de la ciudad, mientras se revisa el PEEC, que trata de salvaguardar decenas de inmuebles de la arquitectura civil de la ciudad. Aprobado en 1990, el PEEC estableció entonces la protección sobre 341 edificios. Ahora, de partida, se incluyen 940 con vistas a integrarlos, total o parcialmente, en un conjunto histórico a definir y preservar. Estará aprobado en un plazo de tres años.
Toda la Alameda o plaza de Compostela, con un entorno revalorizado por recientes humanizaciones, ya estaba incluida en el PEEC de 1990. En el número 2, colindante con la sede de Correos, se dio licencia municipal para rehabilitar integralmente 2.408 metros cuadrados, la misma superficie del anterior inmueble, del que sólo se conservará la fachada, y una ampliación de 6.200 metros de obra nueva enclavada en el patio interior. En total, tres sótanos para aparcamientos, un centro comercial y 40 viviendas en seis plantas. Los vecinos del entorno pusieron el grito en el cielo.
El proyecto de la obra, según ellos, ostensiblemente no cumple las exigencias del PEEC ni se atiene a los criterios y normativas urbanísticas más comunes, como el hecho, por ejemplo, de que los vehículos de bomberos no podrían acceder al pie del inmueble, ya que el acceso sería sólo peatonal y a través de un callejón, el de Los Caños. "Quieren construir un gueto en el puro centro de la ciudad", alarma el vecindario, que no entiende cómo se pudo dar licencia "para esa aberración".
La obtuvo el pasado 3 de mayo gracias al batiburrillo normativo del urbanismo vigués, generado al no aprobarse el plan general que aún se tramita y recobrar su vigencia el plan de 1993. La licencia se tramitaba desde 2005.
El PEEC señala para esa manzana, entre otras cosas, que "se revitalizará como zona comercial", a cuyo efecto se creará "una vía peatonal con cubierta traslúcida en el interior de la manzana", con un aprovechamiento público integral. La promotora se limita a habilitar una mera servidumbre de paso por el callejón, careciendo de acceso directo, preceptivo, a la vía pública. Pero la obra no se paraliza inicialmente por estos detalles, sino porque los sótanos en construcción invaden la superficie de cesión pública. Es, con todo, un comienzo sonado para el arranque del nuevo PEEC.
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