"El 'Kun' puede ser lo que él quiera"

El Atlético rezuma "compromiso". Así es como explica Javier Aguirre la transformación de su equipo en las dos últimas semanas, con 10 goles a favor y ninguno en contra frente a Ercyesspor, Racing y Athletic. "Hablamos las cosas a la cara en el vestuario y de ahí ha surgido un compromiso de trabajo. Pero tenemos que seguir subiendo peldaños", agregó el mexicano. Ayer, además de su arsenal ofensivo, al Atlético le ayudó la fortuna, como reconoció el técnico: "Tuvimos suerte para mantener la puerta a cero. Han sido tres puntos muy sufridos, porque a final lo pasamos mal. El Athletic ha sido el que esperábamos, muy aguerrido y empujado por una afición extraordinaria. Los jugadores acabaron agotados".

Las amplias posibilidades que su ataque le ofrecen al Atlético infunden confianza a Aguirre. "Con la calidad que tiene en ataque, este equipo puede explotar en cualquier momento. Pero también nos sacrificamos para mejorar en defensa. Es importante trabajar con y sin balón", concluyó.

Agüero y Forlán prosiguieron su estrecha relación con San Mamés. El Kun marcó también la temporada pasada y el uruguayo lleva tres años consecutivos anotando en Bilbao. "Yo soy uno más. Lo importante es que el equipo venció", dijo el argentino. "El gol de Sergio nos dio tranquilidad. A mí se me da bien San Mamés. Siempre motiva ver a tanta gente en tu contra", señaló el uruguayo. Las lesiones fueron la mala noticia. Perea se retiró con una rotura fibrilar y Leo Franco con una distensión muscular.

La cara del desgaste era la de Joaquín Caparrós. El técnico del Athletic fue sincero. "El fútbol es eficacia, y el Atlético tiene un gran equipo. El Kun puede ser lo que él quiera. Nosotros tenemos que trabajar para que lleguen los goles que hoy no aparecieron", dijo el sevillano.

La directiva del Athletic, mientras, había solicitado a sus socios y aficionados la víspera del partido que no arrojaran objetos al terreno de juego. Y San Mamés obedeció. En el encuentro ante el Zaragoza, el meta César recibió el impacto de un objeto que Mejuto González no pudo describir en su acta. La nota del club rezaba así: "Cada trozo de bocadillo, cada golpe envuelto en aluminio, es un agarrón a nuestra propia camiseta. No dejemos en manos de unos pocos el poder jugar o no en San Mamés".