El temporal provoca otra oleada de fuel del 'Don Pedro' en las playas de Ibiza

La playa ibicenca d'en Bossa tuvo que ser cerrada ayer al público por la llegada de una nueva oleada de fuel procedente del buque mercante Don Pedro, hundido frente al puerto de Ibiza el pasado 11 de julio. El combustible se encontraba en el fondo marino y salió a la superficie debido al fuerte temporal que desde el sábado azota las Islas Baleares.

La Capitanía Marítima decidió anteayer retirar las barreras anticontaminantes que rodean la zona donde naufragó el barco, ante el riesgo de que las olas de más de cinco metros las rompieran. Pero, sin la protección de estos topes y con el mar removido, un reguero de fuel de 300 metros de longitud alcanzó ayer a primera hora la costa y obligó a izar la bandera roja en las playas. Antes, algunos turistas no avisados ya habían descubierto por sí mismos que la arena no estaba tan limpia como de costumbre.

Durante la mañana, un grupo de operarios trabajó en la orilla afectada, con el apoyo de una embarcación que retiró del agua varias manchas de combustible. A la playa d'en Bossa también fueron a parar fragmentos de una barrera de protección destrozada por el temporal. Al mediodía, el Gobierno balear informó de que la playa estaba totalmente limpia y la abrió al baño.

La consejera de Interior, Ángeles Leciñena, descartó la posibilidad de que la llegada de fuel se debiera a un nuevo vertido de los tanques del Don Pedro y afirmó que las barreras oceánicas se volvieron a instalar ayer mismo, en cuanto mejoró el estado del mar. El mal tiempo también llevó restos de fuel, en forma de pequeñas lentejas flotantes, hasta las playas de Talamanca i Ses Figueretes, que amanecieron cubiertas por una gran cantidad de algas sucias de chapapote.

'Ferrys' cancelados

Hace casi un mes y medio que el Don Pedro, de 142 metros de eslora, y propiedad de la naviera Iscomar, colisionó contra un arrecife a una milla y media del puerto de Ibiza. Tras una maniobra equivocada, se fue a pique con más de 130 toneladas de fuel. Desde entonces, el dispositivo de limpieza activado por el Ministerio de Medio Ambiente ha retirado cerca de 360 toneladas de residuos vertidos al mar, mientras continúan las tareas de extracción del combustible del interior del buque. El grueso, unas 100 toneladas que se encontraban en los tanques principales, ya ha sido retirado. Los técnicos se dedican ahora a limpiar aceites y carburantes que están en distintos puntos del pecio.

Por otro lado, el temporal obligó ayer a la naviera Baleària a cancelar, por tercer día consecutivo, sus servicios de alta velocidad con origen o destino en Baleares. Los pasajeros que tenían billetes para viajar en los ferrys rápidos de Barcelona, Palma, Dènia e Ibiza fueron recolocados en barcos convencionales, cuyos trayectos duran aproximadamente el doble de tiempo.