48 horas para Garbajosa
La Federación Española acuerda con el 'pívot' un plazo de dos días para que consiga que los Raptors le autoricen a jugar el Europeo
Las tornas han cambiado en el caso Garbajosa. Si la semana pasada era la Federación Española de Baloncesto (FEB) la que esperaba una llamada de Toronto que liberara al pívot para poder disputar el Campeonato de Europa, ahora es la propia federación la que impone plazos: 48 horas. Ese límite temporal, dos días, fue la principal conclusión de la reunión mantenida el pasado sábado en Ourense entre José Luis Sáez (presidente de la FEB), Delfín Galiano (médico de la selección), Pepu Hernández (seleccionador nacional) y el mayor interesado de todos, Jorge Garbajosa.
El pívot madrileño es ahora quien lleva personalmente los contactos con Toronto. "No queremos que nadie piense que estamos forzando al jugador para que juegue ni a los Raptors para que lo liberen", declaró anoche el presidente Sáez a este periódico. Por eso es el propio Garbajosa quien trata de convencer a su equipo de que está preparado para jugar en el Europeo. Y, de momento, ya ha transmitido a Toronto que tiene un plazo de dos días para solventar su situación. ¿Y si no lo consigue? "Si no hay beneplácito del club", explica Sáez, "ya veremos cómo actuamos. Nos hemos movido siempre en el respeto máximo hacia el jugador y hacia su club y por eso no queremos cometer en este momento ninguna imprudencia".
Sáez reconoce que la situación no es positiva "ni para el jugador ni para la selección". Tampoco para el técnico, Pepu Hernández, que necesita conocer cuanto antes si podrá contar con Garbajosa para el Europeo, que comienza el próximo 3 de septiembre. El seleccionador desea comenzar a trabajar con el bloque definitivo de 12 jugadores que disputen el campeonato. No le falta sustituto. Sin Garbajosa, será el barcelonista Trías el que ocupe su lugar. Y por eso Pepu quiere contar desde el amistoso de mañana en Valencia frente a la República Checa -y para los otros tres partidos de preparación frente a Alemania (22 y 28 de agosto) y Francia (29 de agosto)- con una plantilla cerrada y definitiva.
La decepción de la FEB con los Raptors no procede tanto de una posible respuesta negativa a que Garbajosa juegue el Europeo, sino precisamente por la ausencia de respuesta. La delegación
(Delfín Galiano y Jesús Bueno) que viajó el 9 de agosto a Toronto junto a Garbajosa para que el pívot pasase los análisis médicos con su club, regresó a España con la promesa de una respuesta inmediata. "Los Raptors han comprobado que su tobillo se encuentra perfectamente", declaraba entonces Bueno mientras Garbajosa, algo más prudente, prefería "esperar a la valoración final".
La directiva de Toronto se iba a reunir el domingo 12 de agosto con los médicos del club para ofrecer ese mismo día una respuesta a la FEB. Eso dijeron. Pero Bryan Colangelo, director general de los Raptors, nunca llamó. Y se limitó a declarar el pasado miércoles en la web del equipo: "Nuestro equipo médico no ha decidido aún que el jugador esté recuperado para la práctica del baloncesto". Un jarro de agua fría para las expectativas de la federación. Y desde entonces, ninguna noticia procedente de la capital de Ontario. La FEB sabe que la demora se debe a que Toronto no desea que Garbajosa dispute el Europeo. Y lo cierto es que los Raptors tienen sus motivos: el jugador, que cumplirá
30 años en diciembre, tiene contrato hasta 2009 a razón de tres millones de euros por campaña. Y no quieren arriesgar la inversión.
Los precedentes no ayudan
Tampoco ayuda que Chris Bosh, compañero de Garbo en Toronto, haya renunciado a jugar el preolímpico con la selección de EE UU para recuperarse de una lesión en el pie. La actitud de Bosh, comparada con la de Garbajosa, puede pesar en su contra.
Si no logra la aprobación en estos dos días de los Raptors, a Garbajosa le quedan dos opciones. La primera, que la FEB considere contratar una póliza extraordinaria (y más elevada) por Garbajosa que complemente la que suscribieron en junio con Helvetia Seguros. La otra, que el pívot juegue el Europeo sin el permiso de su equipo. Una posibilidad conflictiva que pondría a Garbajosa en el disparadero, pero a la que podría acogerse si los Raptors siguen ofreciendo la callada por respuesta.
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