El PP exige a la ministra de Fomento que explique la situación de la red de cercanías

El PP de la Comunidad Valenciana ha decidido seguir la estela reivindicativa abierta por el caos en las infraestructuras que viene sufriendo Barcelona. La secretaria de Comunicación en la Comunidad Valenciana, Sagrario Sánchez, exigió ayer a la ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, que explicara "con todo lujo de detalles" la situación de "abandono permanente" de la red de cercanías de Renfe en el territorio valenciano y en el corredor mediterráneo.

¿En qué basa Sagrario Sánchez sus reclamaciones? La primera, como es habitual en el PP, en el trato discriminatorio que recibe la Comunidad Valenciana - "los valencianos se merecen el mismo trato que el resto de comunidades autónomas"-; la segunda en el hecho de que, según dice, "trenes de cinco líneas de cercanías, concretamente los convoyes que circulan por las provincias de Valencia y Castellón, registraron un total de 168 averías y 249 trayectos con retraso durante todo el 2006". Estos problemas fueron provocados por incidencias en las vías, electrificación, catenarias, sistema de telecomunicaciones y control de tráfico, además de otras causas como descarrilamiento o incendios. Todo ello, según la portavoz popular, revela "la incapacidad del Ministerio de Fomento para gestionar esta competencia y el abandono del Gobierno de Zapatero para la mejora de las infraestructuras ferroviarias".

Sagrario Sánchez, pese a lo que pudiera deducirse de sus palabras, no reclama la transferencia de la red de cercanías de Renfe a la Generalitat, y se limita recordar "las continuas reivindicaciones del Gobierno valenciano y del PP para que los convenios de mejora de la red de cercanías sea una realidad lo antes posible, dejando contra las cuerdas la seguridad de los valencianos". Sánchez quiere que la ministra de Fomento explique hoy en el Congreso de los Diputados, además de la situación de Cataluña, la precariedad de las infraestructuras ferroviarias valencianas.

El 3 de julio del año pasado murieron 43 personas y otras 47 resultaron heridas en un accidente en la línea 1 del metro de Valencia, cuyas competencias son de la Generalitat. Ningún político del PP asumió responsabilidad alguna.