Diego de los Santos, 'Rubichi', cantaor flamenco
Mantuvo la fidelidad y el rigor del cante de sus mayores
Ha muerto, en Cádiz, el cantaor flamenco Diego de los Santos, más conocido por su apodo familiar de Rubichi. Era un cantaor excepcional, aunque no propiamente un artista, pues donde él se sentía a gusto era en la reunión de poca gente. Pero cantaba como muy pocos eran capaces de hacerlo, con profundidad y concentración inigualables.
Había nacido en Jerez de la Frontera (Cádiz) en 1949. Pertenecía a una familia ensolerada de cante. Hijo del cantaor aficionado Mingo Rubichi, hermano de Agujeta el Viejo y de El Chalao, y el que mejor cantaba de los tres, según todos los testimonios. Diego Rubichi se mantenía en la misma línea de fidelidad al cante de sus mayores, sin caer en las irregularidades a veces frecuentes en su primo Manuel Agujeta.
Me contaba con gran emoción las vivencias de su niñez, cuando el padre llegaba a cualquier hora de la madrugada, caliente después de una fiesta, y comenzaba a cantar y la familia se levantaba a escucharle, como lo hacían muchos vecinos que llenaban la humilde vivienda.
Diego Rubichi era un extraordinario cantaor, siempre coherente y riguroso con su propio compromiso personal de culto al cante de los suyos, que mereció siempre un reconocimiento de su arte mucho más importante del que generalmente se le concedía. Tenía publicados dos discos, en Francia, donde era más celebrado que en España.
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