Una piscina y una escuela

El borrador del contrato para que Valencia mantenga la sede de la Copa del América en Valencia prevé que la nueva edición cueste a las arcas públicas 105 millones de euros a pagar hasta 2009, frente a los 90 millones desembolsados en la pasada edición, que se prolongó cuatro años. Como en la anterior ocasión, el Gobierno asumirá el 40% de ese canon por los derechos de la competición de vela, otro 40% la Generalitat, y al Ayuntamiento le corresponderá el 20% restante. Según el borrador del acuerdo, una cláusula obliga a la empresa America's Cup Management (ACM) a devolver el 7,3% del canon si se inscriben menos de nueve equipos (ahora han sido 12).

A falta de algunos flecos, las partes también negocian que se inviertan 50 millones de euros en una escuela de vela, una piscina que explotará ACM, y oficinas nuevas en la dársena del puerto. Además, las tres administraciones están en principio dispuestas a aportar ayudas a ceremonias y eventos, a la producción audiovisual y a la promoción turística, y a instalar en la zona del puerto un parque de actividades de ocio. Estas inversiones supondrían otro centenar de millones de euros, cuyo pago estaría sujeto a la fórmula que pacten las administraciones en el nuevo Consorcio anunciado por la ministra.

Retener la Copa del América costará una importantísima suma de dinero, aunque la inversión más importante ya está hecha. Con el préstamo de 500 millones de euros del Instituto Oficial de Crédito (ICO) avalado por el Gobierno se han construido las infraestructuras necesarias para la competición. El crédito no se ha agotado y unos 100 millones quedaron reservados para un posible desmantelamiento de las bases y la terminación de uno de los paseos peatonales. En principio, ese remanente serviría para afrontar algunas de las nuevas condiciones de ACM, a la que se garantiza, asimismo, que habrá dos espónsores españoles -ahora lo han sido Endesa y el Santander-.

El nuevo contrato mantiene para ACM el control sobre la gestión y las actividades de la dársena del puerto, aunque los derechos comerciales en los días de carreras de Fórmula 1 los tendrá la empresa Valmor Sport.

Las regatas de 2009 y las competiciones previas coinciden en el tiempo con los planes del puerto de ampliar sus instalaciones, circunstancia a la que se ha opuesto ACM. Los negociadores han sorteado el obstáculo con una fórmula que apunta a una compatibilidad que no interfiera en las regatas. En ese contexto, el consejero de Infraestructuras, Mario Flores, reiteró ayer que el proyecto del puerto se puede "aplazar" durante "tres, cuatro meses o algo más, lo que no supondría tampoco ningún problema".