Choque de trenes

Los estados de ánimo no ganan partidos; al menos no por sí solos. Son una condición necesaria aunque no imprescindible para lograr la victoria, pero cuando un equipo salta a la cancha con la fe, la intensidad y la concentración con la que ayer lo hizo el Tau, el triunfo comienza a decantarse hacia su lado. Si además lo acompaña la calidad, la cosa empieza a estar clara. Y si el equipo contrario está a parecido nivel, el resultado es un vibrante partido de baloncesto.

El equipo de Boza Maljkovic se impuso al Barcelona en el aspecto mental al inicio del choque. Los vitorianos destilaban ganas, unas ganas que pronto se contagiaron a una hinchada receptiva y que comenzaron a retroalimentarse de forma recíproca para hacer valer el factor cancha y poner al Baskonia un pasito más cerca de la final de la ACB.

El tropiezo en la Final Four de Atenas se ve ahora como un paso atrás para coger carrerilla. El equipo es otro tanto en el aspecto mental como en el juego. Maljkovic parece haber conseguido hacer funcionar a sus jugadores y sobre todo ha dotado al equipo de mayor empaque. En el primer tiempo bordó el baloncesto y acarició ventajas cercanas a los 20 puntos. Luego aguantó con firmeza la inevitable reacción blaugrana.

Porque el equipo de Dusko Ivanovic no iba a rendirse tan fácilmente. Además, Navarro, completamente desactivado por los baskonistas durante la primera mitad, estaba desesperado por su inoperancia y la de su equipo y tras el descanso comenzó a tirar del carro. Los triples de La Bomba, Basile y Lakovic recortaron rápidamente la desventaja baskonista, que sobrevivió gracias al acierto de Prigioni y Erdogan y las segundas opciones propiciadas por su dominio del rebote ofensivo, con especial mención al gran trabajo del poste brasileño Tiago Spliter.

Al final, la reacción barcelonista se quedó sin premio y el Baskonia se anotó el primer triunfo de la semifinal, que tendrá su continuación el próximo domingo, de nuevo en Vitoria. Ante su público, el Tau tiene la oportunidad de poner pie y medio en la final, pero a buen seguro que el Barca no dará las facilidades de ayer en la primera mitad, porque ya se ha visto que remontarle al Baskonia es en estos momentos se antoja una tarea difícil.