Los partidos mayoritarios rehúsan aclarar sus gastos en la campaña de Vigo

Ninguno de los partidos con representación municipal en Vigo ha querido aclarar sus gastos en la campaña electoral, aunque ostensiblemente superan los límites establecidos por la ley electoral. Sólo el Partido Galeguista que lidera Manoel Soto adelantó ayer una estimación de gasto, "entre tres y cuatro millones de pesetas", que se ajustaría a lo establecido por la ley electoral.

EU-IU instó el jueves a la Junta Electoral y a la Fiscalía la investigación de los gastos de la campaña electoral de los cuatro partidos con representación municipal. EL PAÍS intentó ayer obtener esa información, o algún referente que permitiera hacer una estimación razonada, en las oficinas de campaña del PP, PSdeG, PSOE y PG.

Sólo el PG dio algunas referencias: 80.000 euros de gasto total en Galicia, de los que unos 20.000 corresponderían a Vigo, que incluiría el gasto en las 30.000 plantas que los candidatos han repartido en la campaña. "Las compramos en el invernadero de un amigo, que nos las suministra muy baratas", señalaron fuentes del partido.

"Hasta que no haga falta, y nos pongamos a investigar, no podemos decir nada", respondieron, por su parte, en la oficina electoral del PP. En la del PSdeG no fueron mucho más explícitos: "Hemos hecho una campaña muy austera y con gastos muy raspaditos, por debajo de los límites que marca la ley", dijeron. Tampoco pudieron aportar ningún indicador de gasto en el BNG, "ya que eso lo lleva la dirección nacional desde Santiago".

El artículo 193.2 de la Ley Electoral dice textualmente: "Para las elecciones municipales, el límite de los gastos electorales será el que resulte de multiplicar por 12 pesetas el número de habitantes correspondientes a las poblaciones de derecho de las circunscripciones donde presente sus candidaturas cada partido (...) Por cada provincia, aquéllos que concurran a las elecciones en, al menos, el 50% de sus municipios, podrán gastar, además, otros 16 millones de pesetas".

En el caso de Vigo, el límite de gasto electoral estaría en unos 19,5 millones de pesetas, esto es, menos de 118.000 euros. Teniendo en cuenta los costes de la producción publicitaria, más los de vallas e inserciones en los medios de comunicación, los partidos mayoritarios multiplican ostensiblemente el límite legal, en Vigo como en las demás ciudades.