Un corazón acelerado

Juan Carlos de la Ossa debe de tener por lo menos 1.000 o 2.000 amigos. Y ninguno para de contar historias. "Recuérdale que nos ha prometido un jamón si gana el maratón de Londres", dice Clemente Alonso, triatleta de elite que comparte alojamiento en la Residencia Blume. "Dile que te enseñe su arma secreta", aconseja Luis Miguel Martín Berlanas, atleta de 3.000 obstáculos. "Tranquilo, tranquilo, que ya está su novia dándole masaje en las fascias", explica su entrenador, y también amigo, Antonio Serrano. Medio mundo, eso parece, está pendiente del debut del atleta de Tarancón (Cuenca) en el maratón, hoy en Londres, donde hasta ahora sólo ha ganado un español, Abel Antón en 1998. "Esperaba otras sensaciones", dice De la Ossa, de 30 años, el mejor especialista español en la actualidad en los 10.000 metros y en el cross, que da el salto a los 42,195 kilómetros porque "para un fondista el sueño es ganar un maratón olímpico. Mientras sé que en 10.000 metros es imposible superara los africanos, en maratón, como demostró Stefano Baldini en Atenas, los europeos podemos decir algo. Y para llegar a Pekín 2008 con posibilidades necesito correr antes dos o tres maratones".

Con una dolorosa fascitis plantar que le ha hecho infiltrarse, se ha entrenado 190 kilómetros semanales

Llegar con posibilidades al primero ha precisado de un largo y doloroso camino. "Ya me habían avisado de que iba a ser fastidiado, pero ha sido más duro de lo que esperaba", decía De la Ossa, diminuto atleta -físico ligero de keniano, largas piernas, corto torso, gemelos livianos, 1,68 de estatura, 50 kilos de huesos y piel- diez días antes de la cita londinense, cojeando ligeramente por un problema en el glúteo, otro en la espalda, otro en los isquiotibiales. Varios dolores verdaderos y una única causa culpable: las plantas de los pies. "Yo, en teoría, pisaba primero con el talón y después con la puntera", dice De la Ossa, bronce en el último Europeo de 10.000 metros, mientras se quita una zapatilla y muestra el arma secreta, la solución casera, a que se refiere Berlanas para combatir sus males: unas plantillas de goma espuma recortadas con tijeras. "Pero como me duelen tanto los pies, piso con la planta entera, piso mal, con lo cual se me sobre cargan otros músculos y acabo fatal".

"De la Ossa sufre de fascitis plantar, o sea, de inflamación dolorosa y fibrosis de las fascias, el tejido conjuntivo que rodea los músculos propios de la planta de los pies", explica Juan Manuel Alonso, director médico de la federación española. "Aunque quizás el problema se puede arreglar con un mes de reposo y rehabilitación, la solución definitiva pasa por el quirófano".

"Ya, pero yo prefiero la solución más conservadora, ya que a mi edad no puedo arriesgarme a que una operación que no salga bien, aunque todo consiste en una incisión y un tajo en la fibrosis, me tenga un año sin poder correr. Así que pararé un mes después de Londres y a ver qué pasa", dice De la Ossa. "Si no mejoro, me opero, lo que supondría, impepinablemente, perderme la temporada de verano y los Mundiales de Osaka".

Todo antes que volver a pasar por la tortura de las últimas semanas, levantarse con dolores horrorosos, infiltrarse con Feldene media docena de veces para resistir... "Pero, pese a todo, he hecho buenos entrenamientos", dice De la Ossa. "Aunque me costaba doblar sesiones. He tenido que reducir las series de calidad y no he podido pasar de 10 sesiones semanales".

"Ha superado los problemas y ha podido hacer la preparación típica, a ritmo de los grandes", explica su entrenador, Antonio Serrano, uno de los pocos españoles que ha bajado dos veces de 2h 10m. "Ha sido capaz de hacer días de 45 kilómetros en dos sesiones y alguna sesión única de 35 kilómetros por debajo de 3m el kilómetro. Semanas medias de 190 kilómetros y alguna de 210 kilómetros".

Serrano y De la Ossa llegaron a Londres el viernes. Repasaron la lista de participantes -vieron que están los mejores de los mejores: el recordman mundial, Paul Tergat (2h 4m 55s), el gran Haile Gebrselassie, el ganador de 2006, Félix Limo, Baldini, el campeón del mundo, Jauad Gharib...- y pensaron la táctica. "En un maratón lo importante ocurre a partir del kilómetro 30. Hay que ir relajado hasta entonces", explica Serrano. "Juan Carlos correrá hasta entonces con el segundo grupo, el de Baldini, que lleva liebres para pasar la media maratón en 1h 3m 30s, y después ya veremos. Pero yo creo que será capaz de corre en menos de 2h 8m [el récord de España está en 2h 6m 52s, Julio Rey 2006]".

En el kilómetro 30 pues, por los muelles de Millwall, a 12 kilómetros de la llegada, el The Mall, junto al parque de Saint James, el corazón de De la Ossa, habitualmente acelerado -su pulso en reposo es espectacularmente alto para un fondista, superior a 50 latidos por minuto-, dará un brinco y pasará por encima de las 170 pulsaciones. Será el momento en el que el cuerpo le diga si puede ir a por todas, si la emoción no le engaña.