Tele 5 reclama al Gobierno que limite la publicidad de las televisiones públicas

Tele 5 ha redoblado su discurso contra TVE y las televisiones autonómicas por utilizar una doble vía de financiación: recursos publicitarios y subvención pública. Los directivos de la cadena privada aprovecharon ayer la junta general de accionistas para reclamar una reducción "cuantitativa y cualitativa" de los anuncios en TVE. El presidente de Tele 5, Alejandro Echevarría, afirmó que en estos momentos el estado es justamente el contrario: "Se está experimentando un incremento notable en los índices de saturación publicitaria". Esta situación "debe cesar de inmediato" y el Gobierno debe dar respuesta al compromiso contraído con las privadas e "imponer claros límites publicitarios a las cadenas públicas, empezando por TVE", agregó.

Tele 5 lanzó esta petición después de desgranar los mejores datos económicos de su historia. En 2006, la compañía liderada por Mediaset -propiedad del magnate italiano Silvio Berlusconi- obtuvo un beneficio neto de 314 millones de euros (frente a los 290 de 2005), que se distribuirán íntegramente (1,28 euros por acción).

Tele 5 extiende sus quejas a la Ley del Cine (que obliga a las televisiones a invertir en producciones europeas el 5% de sus ingresos), a las actuaciones de las entidades de gestión de propiedad intelectual y al proceso de implantación de la televisión digital terrestre (TDT), que apenas llega al 35% de los hogares. Echevarría insistió en que el proyecto del Ministerio de Cultura de ampliar un punto la inversión obligatoria en el sector cinematográfico es una injerencia en el principio constitucional de libertad de empresa y raya la "expropiación". Frente a este catálogo de críticas, elogió el enfoque de la futura Ley General Audiovisual. El consejero delegado, Paolo Vasile, destacó el liderazgo de Tele 5: en 2006 llegó al 21,2% de cuota de pantalla y durante 229 días fue la cadena más vista. Recordó que el 81% de la producción es propia, y en tono irónico dijo que el binomio Yo soy Bea y Aquí hay tomate equivale, en términos de audiencia, a un partido cada tarde de Liga de Campeones.