El Liverpool golea al PSV y sentencia su pase a semifinales

El Liverpool jugó anoche en el PHillips Stadium de Eindhoven como si lo hiciera en Anfield. El cuadro de Rafa Benítez no dio ninguna opción al PSV de Ronald Koeman (0-3), que bastante hizo con eliminar en la ronda anterior al Arsenal, el vigente subcampeón. Los holandeses cayeron en la red que los reds tejieron en el mediocampo. Tan sólo Wayrynen, en un tiro cruzado que casi entra en la portería de Reina tras un rebote, le metió una pizca de miedo al campeón de la Champions de 2005. Cuatro días después de bailar al Arsenal, Gerrard, Riise y Crouch prácticamente sentenciaron la eliminatoria y aseguraron el pase del Liverpool a las semifinales.

A falta de suspense en Holanda, en Milán sobró. A raudales. En el último segundo Van Buyten empató un duelo que empezó con muy mala pinta para los germanos. Pirlo consiguió adelantar a los de Ancelotti al borde del descanso tras mil ofensivas italianas. Por entonces, Rensing, reemplazo de Kahn -castigado por la UEFA con un partido por su comportamiento en el control antidopaje de Múnich, tras eliminar al Madrid- era el jugador más sobresaliente de la escuadra bávara. Pizarro puso las tablas a la vuelta de los vestuarios, aunque Kaká volvió a poner por delante a los rossoneros. Sentenciados en el calcio, con el Inter encorajinado en superar los cien puntos en la Serie A, mucho tendrá que nadar en la vuelta el grupo que preside Berlusconi. Anoche era el único clasificado en cuartos de final superviviente de la edición anterior. A su favor tiene la historia; ante el Bayern siempre salió airoso.