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El alcalde de Vic renuncia a formar parte de la candidatura de CiU

El democratacristiano Jacint Codina, de 63 años y alcalde de Vic desde 1995 por Convergència i Unió, comunicó ayer que renuncia a formar parte de la lista de la formación en las próximas municipales.

Tras semanas de negociaciones que han evidenciado el distanciamiento entre los dos socios electorales. Codina exigió manos libres a Convergència para confeccionar la lista municipal y amenazó con no presentarse si éstos no cedían. Convergència ha aguantado el pulso y ha mantenido su propuesta de lista diferente. Ante este callejón sin salida, Codina reunió a los ediles de su partido el lunes y les leyó una carta de renuncia que hará pública mañana. Consultado por este diario, Codina confirmó ayer su decisión firme de no presentarse, aunque dejó abierta la puerta de la ambigüedad apuntando que "de aquí al viernes pueden pasar muchas cosas". Esta afirmación se interpreta como una forma de presión para que sus socios recapaciten.

La dirección de Unió respalda la decisión de Codina y asegura que el alcalde "es el candidato de Unió para encabezar la lista de Vic". Fuentes del partido añadieron que "no hay alternativa a Codina", porque creen que es la mejor opción para revalidar el éxito electoral de CiU, que conserva el poder de la alcaldía de Vic desde las primeras elecciones democráticas.

La pretensión de Convergència es que Unió renuncie a encabezar la lista. Unió no está dipuesto a ello y señala que, según el pacto de la federaciòn, el primer puesto le corresponde a ella.

Consecuencias de la crisis

Las consecuencias de la crisis entre los dos socios nacionalistas no se quedarían aquí. En Unió amenazan con que si no encabezan la candidatura, "ningún hombre ni mujer del partido se sumará al proyecto ni será partícipe de este desastre electoral".

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Se trata de una última medida de presión en un conflicto que ha encendido las luces de alarma en las direcciones de la federación, que ven en peligro el liderazgo de la tercera ciudad de Cataluña en la que mantienen la alcaldía. La primera ciudad en la que gobierna CiU es Tarragona. Tras la reciente crisis y el paso de Agustí Mallol al grupo mixto y la no presentación de Joan Miquel Nadal a la reelección, la formación tiene difícil repetir victoria. La segunda ciudad es Sant Cugat, donde CiU no tiene problemas.

Por otra parte, los ediles del PP de El Vendrell (Baix Penedès) Francesc Caralt y Leopoldo Viñas han abandonado el partido con críticas a la dirección. Permanecerán en el equipo de gobierno, formado por el PP y el PSCV.

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