Un supuesto autor material con tres abogados distintos
La estrategia de defensa que ha utilizado Jamal Zougam desde que fue detenido el sábado 13 de marzo como dueño del locutorio donde se vendieron las tarjetas de los teléfonos móviles que se usaron en las bombas y posteriormente acusado de ser autor material de la muerte de 191 personas ha variado radicalmente en los últimos meses.
Ese cambio coincidió con la llegada de su tercer abogado en todo este tiempo. Zougam se pagó un abogado privado cuando se inició todo el proceso. Se trataba de Mateo Seguí. El procesado por los atentados decidió prescindir de los servicios de Seguí porque no podía pagar la estancia del abogado en Madrid durante la celebración del juicio. Y entonces se encargó de su caso un abogado de oficio, Juan Ramón Gemeño, con el que el procesado estuvo sólo un mes.
Hace poco más de dos meses, un abogado de pago, José Luis Abascal, asumió la defensa de Zougam -que había renunciado al primer letrado que tuvo por falta de dinero- y, a partir de ahí, todo cambió. Zougam había basado hasta entonces su defensa en quitar credibilidad a los testigos que le habían apuntado en diversas ruedas de reconocimiento y en asegurar que cuando ocurrieron los hechos, estaba durmiendo en su casa. El procesado, a partir de la llegada de José Luis Abascal, concedió una entrevista exculpatoria al diario El Mundo y pidió, a través de su abogado, que se tomase declaración en el juicio a tres etarras, a los que la teoría conspirativa ha querido involucrar en los hechos, y se hiciese una prueba pericial de los explosivos.
El abogado de oficio Juan Ramón Gemeño asegura, según informó ayer Cuatro Televisión, que en noviembre pasado le llamó Abascal para indicarle que se hacía cargo de la defensa de Zougam. Le pareció raro y Gemeño explica que le preguntó a su cliente, quien supuestamente le dijo que él prefería seguir con su abogado de oficio.
Gemeño ha presentado una queja ante el Colegio de Abogados por lo que considera una practica irregular por parte de Abascal al asumir la defensa de Zougam. Se ha abierto una investigación para esclarecer estas posibles irregularidades.
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