Detenido el supuesto autor de un doble homicidio en Móstoles

Agentes del Grupo V de Homicidios han detenido a Lucas K., de 25 años y nacionalidad polaca, acusado de haber asesinado a puñaladas a dos compatriotas y de haber dejado malherido a otro el pasado 12 de enero en Móstoles. El supuesto autor fue arrestado por la Guardia Civil y se halla ingresado en la prisión de Villena (Alicante) tras haber cometido, presuntamente, un robo con violencia e intimidación en la capital levantina, según informó ayer la Jefatura Superior de Policía.

El doble homicidio se produjo la noche del pasado 12 de enero, en un piso de la calle del Pintor Ribera, en Móstoles. Los fallecidos eran la propietaria de la vivienda y un hombre que residía en una de las habitaciones alquilada por la fallecida. También resultó herido grave un hombre. Fue éste el que pidió ayuda a los vecinos y después facilitó los datos a la policía.

Dentro de la vivienda se hallaba un hombre de unos 45 años, identificado como Waldemar Stanislaw Sieminski, tendido en el sofá del salón. Sufría varios cortes, pero el que le quitó la vida lo recibió en el cuello y, probablemente, le seccionó la carótida. Murió desangrado. La mujer, Marzena Waicka, de unos 50, se encontraba en uno de los dormitorios de la vivienda, con una puñalada en el tórax y varias repartidas por el cuerpo. Además, sufría un profundo corte en la cara, desde la boca hasta las orejas.

Los agentes del Grupo V de Homicidios le buscaron en distintos puntos de la geografía española, entre ellos, en la residencia de su madre, en Villajoyosa (Alicante). Los investigadores se pusieron en contacto con la Guardia Civil de esa población. Éstos le explicaron que había un ciudadano polaco, con las mismas características físicas similares a la del buscado, en la cárcel de Villena. Había sido detenido por un delito de atraco. Su identidad no coincidía con el buscado, por lo que fueron remitidas sus fotos al testigo de Móstoles. Éste le reconoció sin ningún tipo de dudas.

Los agentes de homicidios se trasladaron a la cárcel alicantina para tomar declaración al sospechoso. En la misma, Luca K., que estaba en la cárcel con otro nombre, manifestó a los policías que había cogido un pasaporte de un conocido para aparecer con una identidad distinta de la suya.