Gasol se dispara

A la espera de aclarar su futuro, Pau Gasol sigue firmando grandes actuaciones en la NBA. La última, la del pasado martes frente a Houston: 30 puntos y 13 rebotes. Otra vez dobles dígitos en puntos y rebotes, la décima esta temporada. Pero, una vez más, Gasol fue el único que respondió y los Grizzlies siguen en caída libre. Nueva derrota (90-98) y sin signos de mejora en un equipo que ocupa la última posición de la Liga, con 37 derrotas y tan sólo 12 victorias.

Nada parece funcionar en Memphis. Tony Barone, el entrenador que llegó mediada la temporada en sustitución de Mike Fratello, no parece dar con la solución. El juego de los Grizzlies es plano y predecible y las derrotas se suceden una tras otra. En esta ocasión, Gasol elogió la actitud de sus compañeros: "No cedimos en la lucha, siempre quisimos cambiar la situación". Sin embargo, el español está obligado a hacer la guerra por su cuenta. Ni recibe el apoyo de sus compañeros en la cancha (sólo Mike Miller le acompañó frente a los Rockets, con 12 puntos), ni de parte del público de Memphis, que ante los rumores de su traspaso le abuchea, silba y acusa de falta de compromiso.

Los hinchas pagan con el español la mala racha del equipo, acusándole de falta de implicación

Así fue el pasado sábado frente a Indiana. Gasol realizó una buena actuación. Anotó 30 puntos y pese a ello abandonó el FedEx Forum entre silbidos. Los hinchas ven que el equipo no funciona y temen por la continuidad de su gran estrella. Los periódicos de Tennessee revierten la situación y alegan una supuesta falta de implicación del jugador con la institución.

Pero el de Sant Boi, ajeno a la polémica y a las críticas de la prensa local, cada vez se muestra más concentrado en el parqué. Sus números ganan en consistencia. Con el del martes, son ya diez partidos con dobles dígitos en puntos y rebotes. Y eso en sólo 26 encuentros, los que ha podido disputar desde que reapareció tras recuperarse de una lesión en el pie izquierdo, que le impidió comenzar la temporada. Ni siquiera quedarse fuera del All Star parece haber afectado a su juego. El 25 de enero conseguía un triple doble (17 puntos, 13 rebotes y 12 asistencias) y cuatro días después anotaba 34 puntos y batía su récord personal de tapones, con ocho.

Mientras, Gasol espera una llamada de Jerry West, jefe de operaciones de los Grizzlies, que le anuncie que se ha llegado a un acuerdo para su salida. En su sexta temporada en Memphis, siendo ya el jugador de referencia del equipo y tras haber llevado a los Grizzlies a los playoffs en tres ocasiones, Gasol espera cambiar de aires y recalar en un equipo con aspiraciones reales de conseguir el título. Además, el hecho de que el propietario de los Grizzlies, Michael Heisley, quiera vender la franquicia, no ayuda a la estabilidad del equipo.

El interés de Chicago y Boston por hacerse con los servicios del español es notorio. Pero otros equipos se mantienen a la espera en un segundo plano, caso de Portland y Miami. La respuesta, como tarde, el próximo 22 de febrero, día en que se cierra el mercado.