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Reportaje:

Capello contra Capello

El entorno empuja al técnico del Madrid a alinear a Gago, cuyo estilo choca con el credo del italiano

Fabio Capello, el entrenador del Madrid, prometió que con la llegada de Diarra su equipo no perdería "más de cuatro partidos". Ya ha perdido cinco. Y Diarra, cuyo coste para el club blanco fue de 23 millones de euros, parece que ya no es titular. Su puesto junto al discutido pero, hasta la fecha inamovible Emerson, lo ocupará a partir del próximo domingo Gago, el cinco recién incorporado del Boca Juniors. Eso, según las pistas que ha dado el italiano en los primeros entrenamientos del año. Un giro en sus planteamientos forzado por la presión popular y las recomendaciones de la cúpula del club.

Capello vuelve así, aunque sea a regañadientes, a las ideas que sostenía hace diez años, en su primera etapa como madridista. Entonces, la media la ocuparon toda la campaña Redondo y Seedorf. Antes, en su etapa en el Milan había contado siempre con algún mediocentro creativo. Después se decidió por el blindaje y desde su llegada al Roma, en 1999, el más creativo de sus parejas de pivotes fue Emerson, quien lo acompañó al Juventus y, ahora, a Chamartín.

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"No soy igual que Redondo, somos distintos, pero entendemos el fútbol igual", dijo ayer Gago en su primera comparecencia como madridista. Un jeroglífico que muestra la prudencia expositiva del mediocentro, muy comedido en sus palabras. Gago piensa que él tiene más llegada que Redondo, aunque esa tendencia a marcharse arriba le ha creado problemas con algún técnico en su anterior club. Por lo demás, se trata de un distribuidor de juego de mente rápida que, al igual que su compatriota, no destaca, sin embargo, por su velocidad a la hora de repartir juego. Una característica, en principio, que choca con el gusto de su entrenador por las transiciones rápidas. Además, imprime su sello a los equipos en los que juega. No pasa desapercibido. O impone su tempo, o sobra del césped. Un modelo más próximo al del clásico cinco del Barcelona, especialmente Guardiola, al que Capello desterró del Juventus.

"No llego como salvador de nada", insistió el futbolista en su papel de muchacho humilde recién llegado a un club "con grandes jugadores" con los que se siente "muy cómodo".

El resto de su discurso siguió el manual del profesional cauteloso: "Me han agradado todos mis compañeros posibles, tanto Guti como Emerson y Diarra". El centrocampista reconoció que en Argentina estaba "más acostumbrado" a jugar como única referencia en el eje, pero que también ha jugado "muchas veces" con otro pivote y no tiene "ningún problema" para encajar en ese sistema.

Su compañero, presumiblemente, será Emerson. El brasileño, que costó 17 millones, también ha sido bastante cuestionado desde la grada e, incluso, por parte de miembros de su cuerpo técnico. Pero Emerson se ha beneficiado de la caída en desgracia de Diarra. El medio de Malí fue sorprendido por las cámaras de televisión cuando asentía a unas palabras del proscrito Cassano quejándose de que Capello siempre alineaba a los mismos. "Entiendo que los futbolistas opinen, pero no entiendo que se queje Diarra, que, precisamente, ha jugado 16 partidos como titular". Resulta, según los números, que uno de esos a los que siempre alineaba Capello y de los que se lamentaba Cassano, era el propio Diarra. Desde su conversación con el italiano, apartado de la disciplina del grupo, Diarra ha desaparecido del equipo. Incluso Guti ha ocupado esa posición en varias ocasiones a lo largo del campeonato. El madrileño, un comodín bastante usado por Capello, también podría ser el acompañante de Gago ante el Deportivo. Una variante que aún aproximaría más el esquema madridista al de hace diez años. Una modificación que recuerda unas palabras de un ex pupilo del italiano, Alessio Tacchinardi, a quien alineó como medio centro en el Juventus: "Capello sólo busca defender, en España eso no gusta". El puesto de mediocentro en el conjunto blanco ha desplazado como objeto de debate al de central. O al menos, pugna con él por ver cuál es la posición más discutida. El club y la grada ya han dado su veredicto. Y quieren a Gago. Por ahora, Capello parece que ha recogido el guante.

Como consecuencia de la llegada de Gago, el canterano De la Red ha iniciado las negociaciones para jugar en el Zaragoza.

Cannavaro y Gago, durante un entrenamiento en la Ciudad Deportiva de Valdebebas.
Cannavaro y Gago, durante un entrenamiento en la Ciudad Deportiva de Valdebebas.EFE

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