Objetivo, salvar el río antes de 2008
Esta semana se han reunido en Mértola (Algarve) asociaciones ecologistas de Portugal y España. El objetivo de ese incipiente movimiento ibérico es promover la candidatura del Bajo Guadiana a parque natural en 2007.
Almargem, Asociación de Defensa del Patrimonio de Mértola y Quercus, por parte lusa, y las asociaciones Greenpeace, Pura Vida y Ecologistas en Acción, por parte española, coinciden en señalar que el Embalse de Alqueva, en el Alentejo, y el Bajo Guadiana son los dos polos de una situación que está a punto de "reventar el potencial ecológico del río".
La estrategia será involucrar primero a las instituciones portuguesas, "gubernamentales y no gubernamentales", para mover esa declaración de parque natural, tratando de que luego el Gobierno español reúna a los alcaldes de la zona y los convenza de la necesidad de proteger el río.
"No creemos que un decreto resuelva el problema", dice João Santos, presidente de Almargem. "Tenemos que presentar propuestas conjuntas para implicar a los ciudadanos, los agentes sociales y los empresarios. Los compañeros españoles nos cuentan que la crispación entre las autoridades y los ecologistas es enorme, así que confían en que Portugal adopte antes esa situación de hecho".
Según el presidente de Almargem, "en las instituciones portuguesas todavía queda gente con la que se puede hablar y funcionarios con sensibilidad ecológica", asegura. Los empresarios turísticos lo saben, y presentan sus proyectos con "todos los adelantos técnicos en materia ecológica". El problema, prosigue Santos, es que muchos no cumplen lo ofrecido: "Todos los campos de Golf cercanos al río prometían el uso de aguas recicladas para el riego. Pero sólo uno lo cumple".
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