Los grupos políticos buscan fórmulas para subsanar el fallo

La ley de Derecho Civil de Galicia, aprobada el 6 de junio de 2006 por unanimidad en el Parlamento gallego, supone una reforma profunda de la anterior regulación del derecho civil, de abril de 1995. Como novedades más importantes introdujo la prevalencia de la ley sobre la costumbre en el sistema de fuentes del Derecho y el reconocimiento de los mismos derechos de los cónyuges a parejas de hecho y matrimonios homosexuales.

Pero el debate social surgió en torno a la reducción de la legítima de los descendientes y del cónyuge viudo, que desde julio pasa a ser el usufructo de la cuarta parte de sus bienes (en la ley anterior era un tercio). La disposición adicional tercera, que equipara parejas con un año de convivencia y matrimonios, la propuso el diputado del BNG Iago Tabarés. El nacionalista explica que "se trataba de equiparar a las parejas de hecho, que tuvieran intención de serlo, al matrimonio". Pero la exigencia de esa voluntad como requisito para imponer a las parejas cargas propias de los cónyuges que sí tuvieron boda no se plasmó en el párrafo de la ley, y ése es el error que Tabarés y sus compañeros de ponencia intentarán reparar en las próximas semanas. "Las críticas son razonables, habrá que corregir los posibles fallos a través de una enmienda a la disposición adicional aludiendo a la voluntad del legislador, o hacerlo cuando redactemos la ley de parejas de hecho", reconoce Tabarés.

Condiciones del PP

El representante del PP, Xesús Palmou, es partidario de esta segunda fórmula porque "esa fue una de las condiciones que el PP impuso para votar a favor de la disposición presentada por el BNG y que permitió la unanimidad de la Cámara para aprobar la Lei de Dereito Civil". "Ya hablé con la ponente del grupo socialista y estamos de acuerdo en que debemos agilizar la futura ley de parejas de hecho, que podría estar aprobada en tres meses", asegura. Palmou sostiene que si el nuevo texto se aprueba antes de julio, los problemas derivados de la redacción del polémico párrafo quedarán resueltos. Según el diputado popular, "antes del mes de julio, cuando transcurra un año desde que la ley entró en vigor, ninguna pareja tendrá problemas". Ésa es también la interpretación que hacen otros letrados consultados por este diario. Para no llegar al verano en la actual situación, el decano del Colegio de Abogados de Santiago pide al Parlamento que se apresure para deshacer este "desaguisado legal". La catedrática, García Rubio va más lejos: cree que el texto, como figura en la actualidad, supone una excepción en el ordenamiento jurídico occidental.