La demanda atrae a otras siete aerolíneas a Manises y L'Altet

El transporte aéreo de pasajeros vive desde hace unos años una auténtica revolución. La llegada de los vuelos baratos ha disparado la competencia, estimulado la demanda y cambiado el panorama de los aeropuertos. De los de mayor tamaño, como es L'Altet, pero también de otros más modestos, como Manises. Sólo esta temporada de invierno siete aerolíneas regulares han empezado a operar desde los dos aeropuertos.

Los dos aeropuertos valencianos están embarcados actualmente en la ampliación de sus instalaciones. Obras que les permitirán en el corto plazo ampliar su capacidad para transportar pasajeros en un momento en el que la demanda se ha disparado. El mercado ha cambiado rápidamente, sobre todo de la mano de las compañías de bajo coste y en general de los llamados vuelos baratos. Crece la demanda y la oferta.

Sólo durante esta temporada de invierno -que abarca desde finales del mes de octubre hasta finales de marzo- tres compañías aéreas han empezado a operar rutas desde al aeropuerto de Alicante (Fly Me, Finnair y Siberia Airlines). Y otras cuatro han iniciado sus operaciones desde el aeropuerto de la ciudad de Valencia (LTE Internacional, Click Air, Alpi Eagles y Deutsche Luftansa, que también inaugura una ruta a Hamburgo que hasta el momento no existía desde estas instalaciones). En conjunto, durante esta temporada operan desde Alicante 52 compañías aéreas y 36 lo hacen desde Valencia, según los datos facilitados por AENA (Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea).

La llegada de una nueva compañía aérea no implica necesariamente su permanencia definitiva, aunque fuentes del sector explican que cuando una aerolínea empieza a operar desde una instalación "suele tener perspectivas de quedarse". Las mismas fuentes subrayan el gran movimiento que se vive a nivel de oferta en los aeropuertos valencianos, en líneas generales también en los del resto de España, al tiempo que aseguran que en el de L'Altet hay cada vez más vuelos regulares y menos chárter. Este último tipo de vuelos viene vinculado al marcado carácter turístico del aeropuerto alicantino, aunque está palideciendo por la creciente oferta de destinos que ofrecen las firmas de vuelos regulares.

Los aeropuertos valencianos son conscientes de la fuerte competencia existente. También las instituciones políticas y económicas. La semana pasada, de hecho, el presidente de la Diputación de Alicante, Antonio Fernández Valenzuela, anticipó que se está negociando con tres compañías aéreas para que instalen su base de operaciones en el aeropuerto de Alicante. En la misma línea, el presidente de la Diputación de Alicante, José Joaquín Ripoll, comentó que se está trabajando para que Easyjet (la segunda compañía en número de operaciones desde L'Altet) fije su segunda base de operaciones en este recinto. Alicante aspiraba hace un año a ser la primera, pero la firma de bajo coste se decidió por Madrid.