"La brutal matanza del 11-M se podía haber evitado"

La Fiscalía de la Audiencia Nacional exigirá al confidente Cartagena durante los juicios del 11-M y de la Operación Nova que explique por qué el 1 de diciembre pasado se retractó en un informe de sus anteriores manifestaciones realizadas como testigo protegido. Sus confidencias permitieron la detención de la célula de Mohamed Achraf, que supuestamente pretendía volar la Audiencia Nacional, y conocer algunos comportamientos de los presuntos autores del 11-M a los que conocía. Ahora, en un escrito de 16 folios afirma que "la brutal matanza del 11-M se pudo haber evitado" si la principal unidad de la policía contra el terrorismo islamista hubiera hecho caso de sus advertencias, efectuadas entre octubre de 2002 y octubre de 2003, bajo el mandato del PP. La policía niega todos los extremos del escrito de Cartagena, cuyo controlador era Antonio Jesús Parrilla, ahora preso por supuesta revelación de secretos sobre una mafia policial que traficó con explosivos.

- "Se les pudo detener". "Estaba seguro de que la brutal matanza del 11-M se podía evitar, incluso deteniendo a los verdaderos autores antes de que suceda", señala Cartagena, quien explica que fue captado por la Unidad Central de Información Exterior (UCIE) de la Comisaría General de Información en 2002. Primero le pidieron informes sobre el grupo de Serhane Abdelmajid, el Tunecino, y de Mustafá el Maymouni, el primero muerto en Leganés y el segundo, implicado en el atentado de Casablanca.

Cartagena relata que en la última reunión, el Tunecino dijo que "buscaba a personas capaces de convertirse en mártires, haciendo la yihad en territorio español y como muy lejos en Marruecos, Argelia y Túnez". Cartagena informó a la UCIE, que le dijo que ese grupo "decía muchas palabras pero que no actuaría". Fuentes de la lucha antiterrorista niegan que hiciese esta advertencia.

- "La hemos cagado". "El día 3 de abril [de 2004], a las 7.00, me vino a buscar un coche oficial para que los acompañe a Madrid (...) Nos reunimos en el Parque Juan Carlos I, con algunos ya conocidos de la UCIE y otros que no conocía (uno me lo presentan como comisario para que le cuente lo que sé relacionado con el grupo del 11-M)". Les recordó entonces la última información que les dio. "Ellos me pedían que me olvidase del pasado. El supuesto comisario se levantó para realizar una llamada y le oí decir 'como este moro hable de esa manera la hemos cagado".

- Operación Nova. El confidente matiza sobre la Operación Nova: "Se reúnen conmigo [agentes de la UCIE] para redactar el último informe, donde figura que este grupo quería atentar contra edificios emblemáticos, refiriéndose principalmente a la Audiencia Nacional para poder destruir archivos que afectan a islamistas y matar a los jueces que llevan las causas, nombrando a Baltasar Garzón y a Juan del Olmo (algo que nunca he llegado a saber en mi investigación)". La policía le hizo firmar "informes redactados por ellos" de la operación y "un papel en blanco". Asegura que le pidieron que le dijese a Mohamed Achraf, supuesto jefe de la célula, que sabía quién podía facilitar explosivos en España, "aunque él nunca mencionó nada sobre atentar".

- Islamistas y ETA. El confidente dice que la UCIE le "prohibió mencionar ante Garzón la relación ETA-islamistas". "Una vez les comenté que Achraf había coincidido en la cárcel con el etarra que intentó asesinar al Rey, creo que se llama Rego Vidal, y éste le ofreció contactos con miembros de la banda (...)".