El reto de la pequeña empresa
Las 'pymes' son grandes creadoras de empleo, si bien hasta el 85% ha desaparecido a los cuatro años de nacer
Las pequeñas y medianas empresas son la inmensa mayoría del tejido productivo español y su gran motor de empleo. Un motor, sin embargo, con un altísimo índice de mortandad en sus cuatro primeros años, que llega al 85% en algunos sectores. Según los expertos, la tendencia indica que en 10 años las mujeres sobrepasarán a los hombres en número de pymes creadas.
"En 10 años habrá más mujeres emprendedoras que hombres", asegura el coordinador de un estudio internacional sobre el tema
"Los tradicionales motores de empleo en España, las grandes compañías y las administraciones públicas se están desvaneciendo y su lugar lo ocupan las pymes". La sentencia corresponde a Ignacio de la Vega, director del Centro Internacional de Creación de Empresas del Instituto de Empresa, y resume una situación que se ha acentuado a lo largo de 2006. En su intervención en el reciente congreso Inicia Negocios, celebrado en Madrid, el experto desveló algunos de los datos que se recogerán en el capítulo español del informe internacional Global Entrepreneurship Monitor (GEM) de este año, aún en fase de elaboración.
Una de las revelaciones más significativas de esta investigación reside en la tasa de creación de pymes por parte de mujeres. En 2004, la proporción fue de 0,39 mujeres por cada hombre; en 2005 subió significativamente hasta el 0,58, y en 2006 el estudio refleja una fuerte consolidación de esta tendencia, al aumentar de nuevo hasta llegar al 0,7. Según Ignacio de la Vega, se trata de un fenómeno imparable, que implica que "dentro de unos 10 años se produzca una inversión, es decir, pasará a haber más mujeres emprendedoras que hombres".
¿Razones? El profesor del Instituto de Empresa subraya el hecho de que "muchos nichos de actividad femenina no están todavía explotados". Ahí entran campos como el del cuidado a mayores y otras personas en situación de dependencia, que se verá muy reforzado con la entrada en vigor de la nueva ley impulsada por el Gobierno de Zapatero. Para Ignacio de la Vega, hace unos años la principal barrera para que la mujer se convirtiese en emprendedora era psicológica, pero la aversión al riesgo es cada vez menor en este gran colectivo. El hecho de que ya haya más mujeres universitarias que hombres es, según el especialista, un dato que refuerza esta tendencia.
De acuerdo con el avance de datos del GEM para España, 2006 acabará con un "crecimiento significativo" en la tasa de actividad de emprendedores, que en 2005 se situó en el 5,4% del total de la población española entre 18 y 64 años. Esta "eclosión de la actividad emprendedora", en la que predominan las microempresas y los autónomos, se basa en la bonanza de la economía española, con "unos mercados en ebullición, el petróleo a la baja y una situación política bastante estabilizada", según de la Vega.
Para el docente del Instituto de Empresa, sin embargo, "lo nocivo es el escaso potencial de crecimiento" que siguen padeciendo las pymes españolas. Según Isidro de Pablo, catedrático de Organización Empresarial de la Universidad Autónoma de Madrid, "entre un 65% y un 85% de las pymes, dependiendo de los sectores, desaparece antes de que pasen cuatro años desde su creación". Un índice de mortalidad muy elevado que, sólo en el primer año, acaba con la mitad de las nuevas compañías creadas. Proyectos mal enfocados, financiación escasa, gestión deficiente y aprovechamiento inadecuado de las posibilidades que ofrecen las nuevas tecnologías para optimizar las inversiones fueron algunas de las causas de fracaso que más mencionan los especialistas.
El año pasado se alumbraron 138.333 nuevas empresas en España, la inmensa mayoría pymes. Fueron 6.155 más que en 2004. De ellas, 131.054 bajo la fórmula jurídica de sociedades limitadas y 2.141 como sociedades anónimas. El promedio de inversión fue de 60.400 euros por empresa, todo ello según datos de Inicia Negocios. Para Sanyu Karani, presidente de Econet, firma especializada en la captación de financiación pública para empresas, los cuatro yacimientos de empleo en pymes con mayor potencial de crecimiento son "los relacionados con la vida diaria, que incluyen desde el cuidado de niños hasta los servicios a domicilio; los vinculados a la mejora del marco de la vida, del que forman parte la seguridad, el transporte colectivo local y la rehabilitación de espacios urbanos; la organización de actividades culturales, deportivas y de ocio, y los servicios medioambientales, en particular la gestión de residuos, agua y energía". Ignacio de la Vega añade los empleos relacionados con la sociedad de la información, sobre todo los que vayan ligados a proyectos empresariales de biotecnología, nanotecnología y la denominada Internet 2, basada en la interactividad y la socialización de los nuevos sitios web.
Una red para emprendedores
Entre las iniciativas recientes puestas en marcha por el sector público y el privado para sacar a las pymes españolas de la indigencia tecnológica destaca la Red PIDI. Puesta en marcha por el Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial (CDTI), organismo adscrito al Ministerio de Industria, Turismo y Comercio, se trata de una red de puntos de información diseminados por toda España en los que cualquier emprendedor puede acceder a asesoramiento personal sobre ayudas públicas. En ellos, le ayudan a identificar la mejor manera de financiar su proyecto empresarial, siempre que esté relacionado con actividades de investigación, desarrollo e innovación.
La página web de la iniciativa (www.cdti.es) recoge la ubicación exacta y los datos de contacto de todos los puntos de la Red PIDI a los que pueden dirigirse los interesados. También desde Internet se puede enviar una solicitud de asesoramiento utilizando el formulario destinado a esta finalidad. La red la componen, en cada uno de sus puntos de atención, agentes locales, agentes de apoyo y supervisores.
El ejemplo del éxito de Barrabés
Barrabés empezó siendo una pequeña tienda de esquí de Benasque (Huesca). Fue de las primeras en subirse a la ola del comercio en Internet y hoy vende sus productos a todo el mundo, hasta el punto de que en Estados Unidos, teórico paraíso del libre comercio, obligaron a sus dueños a limitar sus ventas para no perjudicar a otras empresas del sector. Barrabés ha sido uno de los protagonistas de la reciente feria Redepyme, un evento organizado en Madrid por la escuela de negocios EOI que va por su undécima edición y que este año se centró en la internacionalización de las pymes españolas.
En este encuentro se pudo ver la reconstrucción de un almacén de Barrabés, en el que cualquier pequeño empresario podía aprender cómo hacer compraventas por correo electrónico; hacer un pago virtual con garantías; o analizar los costos con las nuevas tecnologías. "El objetivo es que otras pymes vean con sus propios ojos este caso de éxito y comprendan que también son capaces de hacer algo similar, además de despertar su interés para que apliquen las nuevas posibilidades tecnológicas", sintetiza Luis Sánchez, director de la feria.
Redepyme es un proyecto de formación y asesoría a emprendedores surgidos de la EOI. Está enmarcado en el Programa Crece del Ministerio de Industria y tiene financiación del Fondo Social Europeo. Este año acogió a unas 2.000 pymes de reciente creación.
Según Sánchez, las compañías de Crece tienen una tasa de supervivencia en torno al 80%. "No dejamos nacer a aquellas que no nos parecen viables, reconduciéndolas hasta que lo son", continúa: "Las asesoramos los tres primeros años y se benefician de la enorme cooperación que se da entre ellas, como clientes y como proveedores".
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