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Necrológica:
Perfil
Texto con interpretación sobre una persona, que incluye declaraciones

Antoni Obrador, ex presidente de la Acadèmia Médica Balear

En el hospital Universitario Son Dureta, de Palma de Mallorca, falleció el día 28 de noviembre quien fuera tantos años jefe del servicio de Digestivo, Antoni Obrador

Nacido en Felanitx, Mallorca, en 1951, tras estudiar Medicina en la Península, Obrador regresó a la isla y se dedicó al hospital Son Dureta. Su trabajo asistencial, con la tutela inicial de otro digestólogo de Felanitx, Jaime Gayá, les permitió figurar entre las unidades del país con mayor experiencia en endoscopia digestiva.

El empeño de Obrador en llevar adelante un hospital universitario le convenció para aceptar durante algunos años la gestión médica del centro. Su labor docente como profesor asociado en la Universidad de las Islas Baleares se compaginaba con una investigación fructífera.

El Registro del Cáncer, en el equipo de Avellá, Benito, Cabeza, Catalan o Garau, fue un trabajo modélico en la epidemiología que les llevó a publicaciones en revistas de alto impacto, primero en el estudio del cáncer colo-rectal, después con el resto de neoplasias diagnosticadas en las islas, contra las que tanto luchó Obrador, con sus pacientes, más tarde con su propia enfermedad.

Miembro numerario de la Real Academia de Medicina y Cirugía de Baleares, leyó su discurso de entrada sobre el lenguaje popular de los mallorquines ante la enfermedad. Su impulso a la Academia Médica Balear, en el marco de la Acadèmia de Ciències Mèdiques de Catalunya i Balears, fue decisivo, en unos momentos en que el catalán y la ciencia, andando de la mano, no encontraban precisamente caminos de vino y rosas.

En su carné de ruta, imposible no mencionar el decidido apoyo a la sanidad pública, que pudo parecerle a algunos hasta desmesurado. Obrador, no podía ser de otra forma, ha pasado los últimos días de su vida en el Hospital Son Dureta.

Serio y riguroso en la vida científica y asistencial, a veces parecía reflejar estas características en su relación personal con cierto tono de timidez o reserva, pero cinco semanas de ingreso le permitieron un resquicio a su raíz felanitxera: "Quiero mucho a este hospital, pero quizá exagero porque llevo ya un mes ocupando una de sus camas".

Miquel Roca Bennasar, psiquiatra, profesor de la Universidad de las Islas Baleares.

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