Tavano, 10 millones por 70 minutos

Un remate de Francesco Tavano se cotiza por las nubes. Un gol, ni digamos. Incluso sus minutos de juego valen más que el oro. El delantero italiano del Valencia es el jugador con una producción más cara entre los equipos españoles. El club pagó 10 millones de euros al Émpoli el pasado verano por un futbolista que sólo ha disputado 70 minutos -siete por cada millón-, ha realizado tres remates a portería, ha centrado un balón al área, ha perdido tres balones y recuperado dos y ha cometido una falta por dos recibidas. Son las estadísticas de Tavano en su único partido oficial, un encuentro sin miga como la vuelta de la Copa ante el Portuense el 8 de noviembre. Y ni siquiera fue titular, sino que sustituyó al lesionado Regueiro.

La diferencia de criterio entre Quique y Carboni no puede ser más radical. Mientras el director deportivo defendió una inversión sideral -Morientes costó cuatro millones- por su compatriota, el cuerpo técnico entiende que "no da la talla", que carece de conceptos tácticos y que se entrena "muy mal": "De 60 entrenamientos ha hecho bien 20". Es más, acusan al futbolista de miedo escénico y de verse superado por la presión de un club grande. Justo el temor que rondaba entre los clubes italianos la temporada pasada, cuando algunos tantearon su fichaje.

Formado en las categorías inferiores del Fiorentina, Tavano marcó 19 goles hace un curso con el Émpoli y se convirtió en el segundo máximo goleador en Italia, empatado con Lucarelli y sólo por detrás de Luca Toni. Lippi maduró incluso la idea de citarle para el Mundial, pero una lesión cerró el debate. Curiosamente, los dolores reaparecieron al llegar a Mestalla, en otro momento de gran exigencia. "Es una incógnita. En Italia ya había dudas", comentó Arrigo Sacchi. "Debe conocer el estilo de juego del Valencia", ha explicado Quique, que prefería a Luis García, del Espanyol.

Tavano, de 27 años, y que lleva su nombre (Francesco) tatuado en un brazo, vive en el ostracismo. Primero por unas lesiones musculares que duraron dos meses, y luego por la desconfianza del entrenador. Y eso pese a que el equipo ha reducido en un 50% sus goles y ocasiones en los últimos partidos. Inédito en la Liga, Tavano puede tener hoy su segunda oportunidad. Carboni avaló su fichaje como revulsivo para explotar el contragolpe por su rapidez y tamaño (mide 1,73). El director deportivo negocia ahora una cesión al Racing, al que el Valencia adeuda un millón de euros por Regueiro. "Para mí es difícil aprender el idioma. Voy a clases de español, pero me cuesta bastante. Entrenándome me aplico al máximo", se defiende el carísimo delantero.