Ronaldo tiene al vestuario en vilo

El Bernabéu, como los Cárpatos, es un lugar cargado de mitos y leyendas, algunos apócrifos, otros auténticos, o basados en hechos reales, sobre la vida y obra de un héroe local. En los Cárpatos el personaje es Drácula. En Chamartín el maldito es Ronaldo. El último de estos episodios narrados por vía oral coloca a Ronaldo frente al presidente, Ramón Calderón, en pleno reto negociador. Según fuentes del club, a comienzos de temporada el futbolista reclamó más derechos de imagen de los que percibía y el presidente le replicó con torería: "Si metes 30 goles esta temporada te quedas con el 100%".

Las lenguas más cáusticas del Bernabéu comentan que el presidente hizo la apuesta con información privilegiada: con Fabio Capello como entrenador resultaría imposible que Ronaldo marcase 30 goles porque nunca jugaría lo suficiente. De momento ha disputado 60 minutos en Liga y 38 en Liga de Campeones. Hoy, frente al Steaua, Ronaldo espera ser titular por primera vez en seis meses. Sólo su ambición por jugar le convierte en el principal factor de atención. Es el futbolista de mayor jerarquía internacional del Madrid y su situación marginal mantiene al club y al vestuario en vilo. En el club opinan que Ronaldo ha perdido estímulos, que ha descuidado su preparación, y que por este camino no descartan venderle en enero. El vestuario, esa "piña" de la que habla Raúl, se pregunta si Capello cederá y le dará la titularidad.

Ayer, Ramón Calderón negó haber negociado ningún tema económico con Ronaldo. Este desmentido no puede abolir la leyenda ni los hechos. Uno de esos hechos, confirmado por el entorno de Ronaldo, es que el lunes pasado el agente del jugador que se dedica a sus asuntos comerciales, Fabiano Farah, acudió al Bernabéu para entrevistarse con el máximo ejecutivo económico del club, José Ángel Sánchez. Según el futbolista las conversaciones estaban previstas. Según fuentes del club, Farah no sólo se pasó unas horas en los despachos de Chamartín. Además, intentó ponerse en contacto con Calderón para pedirle una aclaración respecto al futuro de Ronaldo. El futbolista se sintió menospreciado cuando debió calentar en la banda de Tarragona durante 45 minutos el sábado pasado. Su compañero de desventuras, Antonio Cassano, se enfrentó a Capello por ese motivo. En el club piensan que Cassano se inmoló empujado por Ronaldo que, más listo, optó por un prudente silencio.

Ronaldo espera ser titular esta noche frente al Steaua y desenredar la trama que le envuelve desde que arrancó la temporada. El jugador cree que ha llegado su momento. Su entrenador sabe que el brasileño está empezando a impacientarse. Pero Capello necesita ganar tiempo para tomar una decisión de riesgo. Metido en esa empresa articula frases para la historia. "He pensado en hacer algunas cosas pero no sé si las voy a hacer", dijo ayer.

Con esas "cosas" el técnico se refiere a la inclusión de Ronaldo en el equipo. A tres días del estallido del caso Cassano, Capello no quiere apresurarse a dar un paso que puede llevar al vestuario a un nivel intolerable de tensión. De momento, en su esquema no hay sitio para Guti, Raúl, Robinho, Ronaldo y Van Nistelrooy. Debe quitar a uno o dejar a Ronaldo en el banquillo. Ayer apuntó a esta última opción con un argumento justificativo de su conservadurismo. Dijo que quizás hoy no sea el momento de rotar: "Jugamos el partido más importante en lo que va de temporada. Si ganamos nos clasificamos en un 95%".

Capello dijo que ayer Ronaldo se entrenó "bien" y que por ese camino recuperará un lugar importante porque, explicó, una cosa es el jugar por el "nombre" y otra hacerlo por méritos ganados en el campo de juego. "Cada jugador tiene que saber cómo se encuentra ahí", prosiguió el técnico, señalando por la ventana a la cancha. "Ahí es donde hay que hablar. En ese trocito de tierra verde".