Las otras 'Zara'

Inditex inaugura mañana su tienda número 3.000 en todo el mundo. El fabricante de Zara es admirado por su modelo industrial y su triunfo en los mercados exteriores, pero ya no es la única compañía de moda española que pisa fuerte en el resto del mundo. Decenas de empresas cuentan con ambiciosos planes de crecimiento en el mercado exterior. Mango, Cortefiel, Adolfo Domínguez, Caramelo, Neck & Neck, Trucco, Custo, Armand Basi, Rosa Clará o El Corte Inglés (con su cadena Sfera) son sólo algunos de los nombres de compañías españolas que empiezan a despuntar en los mercados internacionales.

¿Qué explica este interés general de las compañías por crear redes propias en el exterior? Según explican sus protagonistas, la moda española gusta en el mundo porque, entre otras cosas, ha sabido aprovechar el hueco que han dejado franceses e italianos, centrados en el lujo, en el segmento medio del mercado. Además, la competencia es cada vez mayor, y las empresas sin suficiente dimensión pueden tener problemas.

Roberto Verino fue el pionero en la esfera internacional, ya que abrió una tienda en París en 1983. Aunque no funcionó y tuvo que cerrarla, el diseñador ha aprobado un nuevo plan de expansión que le ha llevado a abrir ocho tiendas en el exterior, y con otras 20 previstas. Otras marcas, como Basi y Dalmau, abrieron sus tiendas primero fuera de España (Londres y EE UU, respectivamente). Caramelo vende en 23 países, mientras que Trucco tiene ya 47 tiendas en el extranjero, y Amichi, 14.

Todas estas cadenas de moda son muy diferentes; hay industriales, franquiciadores y diseñadores. Florentino Cacheda (de Florentino), por ejemplo, le da suma importancia a la parte industrial, mientras que Verino cree que la clave del éxito está en el diseño, la marca y la distribución.