Los socialistas dicen que el alcalde de Málaga se beneficia de una recalificación

El grupo socialista en el Ayuntamiento de Málaga ha acusado al alcalde de la ciudad, Francisco de la Torre (PP), de beneficiarse de una recalificación urbanística de unos terrenos en la desembocadura del río Guadalhorce. La finca, de unos 15.000 metros cuadrados, pertenece en un 50% a la madre del regidor, de 88 años, y a la ex concejal del PP Concepción Díaz Gutiérrez. Por pasar de zona verde, como estaba calificada hasta ahora, a zona de equipamiento deportivo, como se recoge en el avance del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), los propietarios de la finca tienen derecho a una compensación, en dinero o con otra parcela en otra parte de la ciudad.

El Ayuntamiento, según el PSOE, ha vinculado esos aprovechamientos a una parcela en el sector de La Térmica, uno de los más caros de la capital malagueña. El viceportavoz socialista, Enrique Salvo, aseguró el lunes que con este cambio, el alcalde y su familia podrían construir 130 viviendas en la parcela, lo que le reportaría unos beneficios de 90 millones de euros. El Consistorio negó que se haya asociado la compensación por la recalificación de los terrenos a La Térmica, el de mayor edificabilidad de la ciudad, y añadió que en el caso de que fuera así, el coeficiente de aprovechamiento que le corresponde a la madre de De la Torre equivale a 410 metros cuadrados de techo edificable, aproximadamente cuatro viviendas.

La diferencia entre que la parcela estuviera dentro del sector de La Térmica o no es, según el regidor, que, en el primer caso, "la traducción en aprovechamientos podría ir más rápida", No obstente, De la Torre indicó ayer en conferencia de prensa que "la ventaja posicional que puede tener un suelo sectorizado es el ritmo, pero no la cuantía de viviendas".

Salvo tachó de "inmoralidad" esta modificación urbanística, a la que también calificó como la "mayor operación especulativa de la historia de Málaga". Según el viceportavoz municipal del PSOE, De la Torre debería haberse abstenido en la aprobación inicial del PGOU, el pasado julio, "por tener intereses particulares".

La denuncia del PSOE ha calentado el ambiente político en Málaga a ocho meses de las elecciones municipales. El alcalde aseguró que se trata de una "falsa noticia" por lo que espera que Enrique Salvo la desmienta públicamente "en un plazo de tiempo razonable en torno a los cuatro o cinco días". De no producirse tal rectificación, el regidor presentará "una querella ante los tribunales".

El grupo socialista en el Ayuntamiento exigirá al alcalde que "diga en público cuáles son todas las propiedades de su familia en la ciudad de Málaga", ya que "desde 1995 viene teniendo responsabilidades en materia urbanística y nos tememos que haya podido haber alguna otra modificación o decisión política que en otro momento haya podido favorecer también a su familia", afirmó ayer la portavoz municipal Marisa Bustinduy.