El tramo del nuevo 'by-pass' entre Turís y Llombai se abrirá en 2009

La segunda gran circunvalación de Valencia, prevista para 2010 y que absorberá unos 30.000 vehículos, dio ayer un paso más. El consejero de Infraestructuras y Transporte, José Ramón García Antón, presentó ayer los tramos de esta futura autovía, la CV-50, que en 2009 enlazará la autopista AP-7 y la autovía de Madrid A-3 entre las localidades de Turís y Llombai. El Consell financiará las obras con la fórmula de peaje en la sombra y calcula que el tramo ahorrará 9 euros por hora a los turismos.

La nueva autovía CV-50, que la Consejería de Infraestructuras denomina Ronda Metropolitana, conectará a través de un gran arco las poblaciones de La Llosa (La Plana Baixa) con Sueca (La Ribera) a partir del año 2010. Ayer, el consejero de Infraestructuras, José Ramón García Antón, presentó el segundo tramo de este trazado que conectará la autovía A-3 con la autopista AP-7, que cuenta con 46,4 kilómetros y un coste estimado de 336,61 millones de euros. El consejero indicó que se transformará la carretera actual, de construcción antigua que cruza los núcleos de población por donde discurre en "un arco distribuidor exterior al área metropolitana de Valencia", que permitirá "conectar algunas de las zonas de mayor potencial productivo, aliviando las congestiones de tráfico de los cinturones más interiores".

El responsable de Infraestructuras dijo que este segundo segmento se encuentra en fase de exposición pública, que ha sido prorrogada por haber coincidido con las vacaciones, por lo que se prevé que a mitad de año comiencen las obras y que concluyan a final de 2008 o principios de 2009. La fórmula de financiación corresponde al llamado peaje en sombra, por el cual la Administración cuenta con 35 años para pagar las obras a las empresas adjudicatarias. El director general de Obras Públicas, Victorino Sánchez, indicó que se eligió este sistema tras analizar los estudios de rentabilidad de la futura carretera. "Hablando de cifras muy conservadoras, los usuarios de vehículos ligeros podrían ahorrar nueve euros por hora, mientras que los conductores de transporte pesado, gastarían 19,5 euros menos la hora". De esta forma, según la consejería, el beneficio durante el periodo comprendido entre 2010 y 2041, sería, "por disminución de tiempo de recorrido, de 1.748,37 millones de euros".

Todo ello hace que los beneficios de los usuarios "desde el primer día y durante toda la concesión, sean superiores a los pagos que debe hacer la Administración, lo que demuestra la urgencia y necesidad de esta obra", subrayó Sánchez.

El tramo presentado ayer es el segundo de la segunda circunvalación que cruzará poblaciones del perímetro exterior de la corona metropolitana de Valencia. El primero es el comprendido entre la pista de Ademuz (CV-375) y la A-3. Una pequeña parte de este segmento ya está en obras mientras que la mayor parte de la carretera saldrá a licitación en breve con un presupuesto de 200 millones de euros, según indicó García Antón.

Respecto a este tramo, el consejero indicó que "no existieron prácticamente alegaciones" y afirmó que desde la Generalitat esperan que en el segundo suceda lo mismo porque es una carretera "muy esperada por todos", al tratarse de un "tercer cinturón urbano que vertebrará las poblaciones que en la actualidad tienen acceso a la antigua CV-50", que corresponde a los municipios de Chiva, Godelleta, Turís, Montserrat, Montroy, Real de Montroi, Llombai, Alfarp, Carlet y L'Alcúdia.