El fenómeno que viene

No se recuerda un fenómeno semejante. La noticia, procedente de Linares, donde se disputó el Campeonato de Europa de cadetes, corrió como la pólvora entre los técnicos y los jugadores de la selección absoluta. Ricky Rubio, del DKV Joventut, que ya causó sensación al convertirse en el jugador más joven en debutar en la Liga ACB cuando tenía 14 años y 11 meses, dio el título a España el pasado domingo. Su actuación fue de las que jamás se ven.

En la final, en la que España ganó a Rusia por 110-106 tras dos prórrogas, Rubio anotó 51 puntos (16 de 25 en lanzamientos de dos, 2 de 6 en triples y 13 de 17 tiros libres), además de lograr 24 rebotes, 12 asistencias y 7 recuperaciones de balón. Encima, anotó un triple desde la mitad de la cancha para forzar el tiempo extra. Y lideró las clasificaciones del torneo en anotación (23,3 de media), rebotes (12,8), asistencias (7,1) y robos de balón (6,5). Por supuesto, fue designado el jugador más valioso.

"He jugado la pasada temporada con él y es muy bueno. Va sobrado para su edad [15 años] y ya puede jugar con nosotros", dijo Mumbrú, fichado por el Madrid; "no me ha impresionado lo que ha hecho, pero me sorprenden tantos puntos".

Nacido en El Masnou (Barcelona), Ricky destacó pronto, casi desde que su hermano Marc, que también ha debutado con el primer equipo del Joventut, le convenció para que cambiara el fútbol por el baloncesto.

Manolo Flores, ex entrenador del Barça y presente en el Europeo jienense, opina sobre la actuación de Rubio: "Es lo más grande que he visto. Y he visto algunos partidos en estas últimas décadas. Todo lo que ha trabajado salió a relucir. Mostró una madurez impropia de su edad. Es de otra galaxia. Me gustaría tenerlo en el Barça, pero, ya que no está con nosotros, es un privilegio tenerlo en el baloncesto español".

Andreu Casadevall, ex técnico de la Liga ACB y conocedor de las categorías inferiores, considera: "Su mejor arma es su lectura del juego. Pasa de película. Tiene un excelente manejo del balón. Penetra muy bien. Es muy bueno en el uno contra uno. Sólo debe mejorar en el lanzamiento exterior. Posee sentido de la anticipación".

Su entrenador en los últimos años, Marc Calderón, añadía hace un año, antes de que Ricky fuera alineado en 14 partidos por Aíto García Reneses: "Lo tiene todo para llegar. Sobre todo, actitud".

Los técnicos creen importante que Rubio juegue algunas semanas con gente de su edad, con sus amigos de la selección cadete, menores de 16 años, edad que cumplirá el 21 de septiembre. Eso le puede quitar presión. Entre ellos también prometen Alberto Jodar, ala-pívot del Fuenlabrada; Daniel Pérez, base del Barça, y David Guardia, alero del Unicaja.