El PP impugnará el nombramiento de Serra como nuevo director del Museo Picasso
Cultura afirma que las "inexactitudes" del currículo se produjeron en la versión para la prensa
El presidente del grupo municipal del PP en el Ayuntamiento de Barcelona, Alberto Fernández Díaz, anunció ayer que impugnará en la próxima comisión de política cultural el nombramiento de Josep Serra Villalba como nuevo director del Museo Picasso debido al "controvertido proceso" llevado a cabo, que "ya ha levantado críticas en los ámbitos culturales de la ciudad". El director del Instituto de Cultura Municipal (Icub), Jordi Martí, circunscribió ayer las falsedades -que calificó de "inexactitudes"- del currículo de Serra a la versión presentada a la prensa.
Según Martí, miembro de la comisión que eligió al nuevo director, el original presentado por Serra no contenía los datos erróneos que inflaban su currículo y que han sido contestados por varios especialistas. El director no especificó quién cometió tales "errores", y en qué momento, en el documento que se entregó a los medios de comunicación.
El PP denunció que el Ayuntamiento hizo "muy poca publicidad" de las bases del concurso para acceder a este puesto en sustitución de Maite Ocaña tras su marcha al Museo Nacional de Arte de Cataluña (MNAC). Además, el dirigente popular anunció su voluntad de "acceder al expediente" de Serra para comprobar si cumple los requisitos y averiguar si se exigió un proyecto a los 27 aspirantes que se presentaron a la convocatoria. El PP también criticó que Serra es "más gestor que especialista" en Picasso y director científico. Por otra parte, Fernández Díaz quiso dejar claro que sus críticas no se fundamentan en un "prejuicio" por el hecho de que el nuevo director sea sobrino de Narcís Serra, presidente del patronato del MNAC.
Por su parte, Gema Sendra, secretaria general del Departamento de Cultura de la Generalitat, salió al paso de la polémica acerca del cargo que Josep Serra desempeñaba en el momento de su nombramiento, ya que en el currículo figura como subdirector general de Museos y Promoción del Patrimonio Cultural de dicho departamento, mientras que cuando fue empleado por la Generalitat como eventual, el 12 de julio de 2005, figuraba como responsable del Programa de Diseño de las Políticas de Gestión de las Infraestructuras Culturales.
"Pepe Serra fue contratado para empezar el diseño de las infraestructuras culturales, especialmente en el ámbito de museos y patrimonio. Cuando Ferran Mascarell asumió el cargo de consejero de Cultura, nombró a Josep Maria Carreter director de Patrimonio. En el marco de la reestructuración de su área, Carreter nombró a Elsa Ibars subdirectora de Arquitectura y Arqueología, y a Serra, subdirector de Museos, Difusión y Promoción, el día 1 de junio. Sin embargo, técnicamente crear una subdirección en esta casa requiere ocho meses, de modo que se equiparó su cargo a efectos de responsabilidades y sueldo al de subdirector", explicó Sendra, quien añadió que el circuito administrativo impidió que hasta ahora el nuevo cargo haya sido publicado en el Diari Oficial de la Generalitat (DOGC), lo cual se hará antes de finales de agosto.
Según la secretaria general, "en este momento el Museo Picasso necesita consolidar un modelo de gestión, asumir la forma jurídica de museo, ganar más autonomía y potencia como institución, tareas para las cuales Serra está perfectamente cualificado". "La Generalitat", añadió, "no participó en el concurso ni está en el Picasso; sin embargo, Serra es un hombre de nuestra confianza y lamentamos mucho el daño que se está haciendo a su imagen. Un director se puede rodear de los mejores especialistas, no tiene por qué serlo".
Por lo que se refiere a otros datos que no corresponden a la verdad aparecidos en el currículo que se entregó durante la presentación de Serra, Jordi Martí, afirmó tajante: "No se trata de falsedades, sino de imprecisiones. En este caso lo que está en juego es el honor de Serra".
Respecto a su paso por el Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona (Macba), Martí matizó que Serra fue coordinador responsable de las exposiciones itinerantes cuando era director Miquel Molins, precisión que no aparece en el currículo. Por lo que se refiere a su trayectoria como comisario y coordinador de exposiciones, Martí admitió que "en el currículo había que poner comisario y/o coordinador, y también falta especificar que, en el caso de la exposición Dalí y la arquitectura, fue asistente del comisario". La palabra asistente simplemente desapareció.
Martí rechazó las acusaciones de que ha sido un proceso poco transparente, llevado a cabo por una comisión poco plural, tal como han denunciado miembros del mundo artístico barcelonés. "La comisión valoró los currículos de los candidatos, así como su carta de intenciones, tal como se pedía en las bases del concurso. De las 27 personas que se presentaron, se decidió elegir seis, que fueron posteriormente entrevistadas", explicó Martí, quien añadió que "habitualmente se pide un proyecto cuando se trata de un concurso restringido o por invitación".
"No se puede entender nuestra elección si no se valora el nombramiento como conservadora jefe de Sonia Villegas, quien trabaja en el Picasso desde 1994 y ha sido la mano derecha de Maria Teresa Ocaña durante muchos años. Todo museo tiene dos patas y los perfiles de los dos nombramientos cubren ambas", continuó Martí. "Si hemos acertado o no, sólo el tiempo lo dirá".
Martí no se mostró preocupado por el anuncio del PP de que impugnará el nombramiento. "La próxima comisión se reunirá después de las vacaciones y entonces se darán las explicaciones que se piden. De todos modos, no creo que haya ninguna posibilidad de que el nombramiento pueda ser revocado".
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