"Ha sido como en las películas de accidentes"

Un frenazo brusco y un golpe. Los 312 pasajeros de Thai Airways con destino a Roma y Bangkok sintieron cómo el aparato se agitaba y luego oyeron un ruido. "Ha sido tremendo. Todo el mundo se ha quedado en silencio. A mí me ha recordado a las películas de accidentes", relató Gema Ruiz, una de las pasajeras, mientras rellenaba la hoja de reclamaciones. Fuentes de la compañía Thai no quisieron entrar a valorar el accidente y se limitaron a decir: "Habrá sido un despiste de una u otra compañía".

El choque se produjo sobre las 12.30, pero los pasajeros no pudieron abandonar el avión hasta hora y media más tarde. Dentro, confusión y muchísimo calor. "La tripulación es tailandesa y sólo habla inglés, mucha gente no entendía nada", comentaron varios pasajeros. "Ha sido un agobio, sin aire acondicionado y sin poder salir", añadió otra señora. "Una de las azafatas no hacía más que taparse la cara con las manos", manifestaron otros.

"¡Pero cómo es posible que el piloto no parase al ver que no cabía!", comentaron con ira varios pasajeros. "Vamos, es como si yo voy con mi coche y veo que voy a dar con el retrovisor y sigo para adelante", añadió otro.

Y es que después de la confusión, llegó el momento de pensar. "Y claro, piensas que nos podíamos haber matado. Y encima por un golpe con otro avión, es de pena", señaló Luis Vélez, que a las cuatro de la mañana había cogido un autobús en Burgos para comenzar sus vacaciones.

De los 312 pasajeros, los casi 40 que tenían como destino Roma fueron reubicados en otros vuelos. El resto, los que iban a Bangkok, fueron enviados a dormir a un hotel. "Nos han dicho los de la compañía que saldríamos mañana, que iba a venir otro avión procedente de Bangkok para llevarnos", explicó Cristina López, otra pasajera. Muchos de los viajeros iban a tomar otro vuelo en Tailandia; había pasajeros con destino a Vietnam o Hanoi.