Quince acusados en Sevilla de prostituir a 38 mujeres rumanas
Una de las víctimas es una menor que se fugó de su casa
La policía ha detenido en Sevilla a 15 personas por formar, presuntamente, parte de una red de explotación sexual de 38 mujeres rumanas. Dos de los detenidos, hermanos, ingresaron en prisión. Entre las víctimas se encontraba una menor que salió de su país sin el consentimiento de sus padres. Los detenidos, supuestamente, escondían y retenían a las mujeres en tres pisos alquilados en la localidad sevillana de Camas.
Los presuntos proxenetas son un hombre español, uno marroquí y 13 rumanos. Están acusados de delitos de asociación ilícita, relativos a la prostitución, tráfico de drogas y contra los derechos de los trabajadores extranjeros.
Las mujeres, de poco más de 20 años, según un comunicado de la policía, "vivían en condiciones infrahumanas". "Las recluían en tres casas donde no existía ningún tipo de higiene. Había cucarachas por el suelo. Y dos de ellas habían contraído la tuberculosis. Les impedían la libertad de movimientos. Eran ellos mismos los que las trasladaban de un punto a otro usando sus vehículos particulares. La mayoría de las veces iban a un club de Salteras (Sevilla). Ni siquiera podían ir al médico", explicó Ana Cambón, portavoz de la policía en Sevilla.
La nota policial explica que la investigación se inició cuando la policía sospechó de Daniel C., quien viajaba continuamente al extranjero y regresaba siempre acompañado de "jóvenes y atractivas" mujeres. "Las captaban prometiéndoles un trabajo bien remunerado en España y en condiciones dignas. Una vez en Sevilla se daban cuenta del engaño", aseguró Cambón.
Todas llegaron a nuestro país con documentación falsa y serán devueltas a Rumanía cuando concluyan los expedientes administrativos que les han abierto, señaló la portavoz policial.
El ciudadano marroquí detenido se encuentra en el centro de internamiento de inmigrantes de Algeciras (Cádiz) a la espera de que el juzgado decida si será expulsado a su país o ingresa en prisión.
Los imputados también se dedicaban a la distribución de cocaína entre los clientes. La policía ha intervenido un vehículo, 1.200 euros, joyas, hachís y papelinas de cocaína.
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