Clásicos con solera

Conviven en perfecta armonía desde hace dos décadas, como vecinos bien avenidos, y mantienen con orgullo sus respectivas señas de identidad. El más veterano, el de Torroella, creado en 1980, tiene este año a María Bayo como principal artista invitada en un cartel que incluye al grupo Al Ayre Español y a los pianistas Joaquín Achúcarro y Facil Say. Por su parte, Peralada celebra 20 años con la presencia de estrellas como Montserrat Caballé, Jessye Norman, Riccardo Muti y Daniel Barenboim. En un año marcado por la celebración del 250º aniversario del nacimiento de Wolfgang Amadeus Mozart, la música del genio salzburgués cobra lógico protagonismo en la programación de los dos festivales.

La celebración mozartiana ad

quiere un especial valor sentimental en Peralada, que hace 20 años consagró su primera edición a Mozart y Salieri. Montserrat Caballé fue la gran protagonista de aquel concierto inaugural, celebrado el 18 de julio de 1987, y para rememorarlo, la gran diva catalana volverá a cantar obras de Mozart en un doble concierto programado el 1 de agosto: por la tarde, en la intimidad que proporciona la iglesia del Carme, participará en una sesión de cámara como integrante de un quinteto vocal. El Mozart religioso de mayor brillantez y virtuosismo vocal reinará en el segundo concierto, esa misma noche, en el auditorio de los jardines del castillo de Peralada.

La única ópera de su 20ª edición también saluda al Año Mozart, una versión semiescenificada de Idomeneo dirigida por William Christie al frente del coro y orquesta Les Arts Florissants, que clausurará el festival el 19 de agosto. El capítulo mozartiano incluye un concierto de dos emergentes solistas catalanas, la pianista Laia Masramon y la violinista Katia Novell, con la Orquesta Philharmonie de Praga (6 de agosto).

La oferta lírica se completa con un concierto de Rolando Villazón (8 de agosto) y la zarzuela de Federico Moreno Torroba Luisa Fernanda, que desembarcará con la producción del Teatro Real dirigida escénicamente por Emilio Sagi y musicalmente por Jesús López Cobos (22 y 23 de julio).

Aunque nació como un festival de gran formato, con la ópera y la presencia de grandes divos como protagonistas, Peralada ha ido abriendo su programación a otros géneros. Una gran diva de la ópera, la soprano estadounidense Jessye Norman, ilustrará el espíritu ecléctico de la programación protagonizando una sesión de jazz clásico con canciones de Cole Porter, George Gershwin y Duke Ellington (14 de agosto). Otra propuesta de calado entre el gran público es Daniel Barenboim dirigiendo la Novena de Beethoven al frente del Orfeón Donostiarra, la West Eastern Divan Orchestra (11 agosto). La programación incluye un concierto de Caetano Veloso (28 de julio), y cuatro propuestas de danza, programadas en agosto.

En Torroella de Montgrí, la música se respira de forma más apacible, con una programación que apuesta más por el placer de disfrutar la música que por el desfile de divos mediáticos. La mejora acústica realizada el pasado año en sus dos principales escenarios -la iglesia gótica de Sant Genís y la plaza medieval, que fueron dotadas de cajas acústicas- se traduce en un significativo aumento de la oferta orquestal.

La presencia de María Bayo

en tres conciertos como artista principal invitada es la principal baza de su 26ª edición, que comenzó ayer con un concierto del grupo alemán Harmonie Universelle, dirigido por Florian Deuter y hoy ofrece un recital del percusionista portugués Pedro Carneiro. La soprano navarra ofrecerá su triple actuación en agosto. En su primera cita, Bayo se sumará a la celebración mozartiana interpretando una selección de arias, acompañada por la Orquesta de Cámara de Praga, dirigida por Graziella Contratto (día 6). En su segunda actuación, mostrará su faceta liederística junto al pianista Roger Vignoles (día 14). En la clausura del festival, Bayo compartirá escenario con Eduardo López Banzo y el conjunto Al Ayre Español en un concierto barroco que recupera fragmentos de zarzuelas de José de Nebra e incluye obras de Haendel (día 22).

El festival apuesta este año

por la creación de una orquesta propia a partir de un grupo -La Principessa Filosofa- que nació el año pasado impulsado por músicos catalanes que colaboran con prestigiosos conjuntos de instrumentos originales españoles y extranjeros. El grupo se presentará con dos conciertos. El primero, dirigido por Marek Stryncl, es una versión del oratorio La obligación del primer mandamiento, K 35, compuesto por Mozart a los 11 años (5 de agosto). El segundo es el tradicional concierto en memoria del ex ministro asesinado por ETA Ernest Lluch, estrechamente ligado al festival, que este año recupera obras de autores catalanes del barroco y el clasicismo en una velada dirigida por Farran James, concertino de la orquesta (día 8).

Un habitual del festival, el gran pianista Joaquín Achúcarro, ofrecerá un recital con piezas de Beethoven, Chopin y Bach-Busoni (20 de agosto), y el prestigioso Cuarteto Endellion brindará dos estrenos; el Cuarteto núm 3 del compositor catalán Joaquim Homs, cuyo centenario se conmemora este año, y el ciclo de Eduardo Rincón Testamento del náufrago, sobre poemas de Juan Luis Panero, con el barítono Pau Bordas (día 3).

El apartado orquestal incluye la presencia de dos conjuntos. La Sinfonia Varsovia actuará bajo la batuta de Grzegorz Nowak en dos conciertos (16 y 17 de agosto) y la Orquesta de Cámara de Praga acompañará a la joven violinista española Leticia Moreno (día 4).

Las músicas del mundo también tienen su espacio en Torroella con la cantante griega Savina Yanatou y el valenciano Miguel Gil, con el grupo Primavera en Salonico (22 de julio), el grupo del Congo Les Tambours de Brazza (12 de agosto) y la cantante tibetana Yungchen Lhamo.