Un 'comando' chií asesina a 40 suníes en plena guerra sectaria en Bagdad
La espiral de violencia y horror que padece Irak parece no tener límite. En una de las peores matanzas sectarias cometidas en el país, milicianos chiíes montaron ayer controles en el barrio de Jihad -una zona de Bagdad de mayoría suní-, sacaron a numerosos civiles de sus coches y asesinaron a más de 40 que identificaron como suníes. Se trata de uno de los más sangrientos capítulos de la guerra sectaria desatada en Irak. Horas más tarde, en venganza, dos coches bomba estallaron en una mezquita chií. Murieron 20 personas.
Por otro lado, cuatro soldados de EE UU fueron acusados ayer del asesinato de una familia y la violación de una joven. Un ex soldado ya ha sido procesado.
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