Los 'mossos' buscan a los inquilinos de la casa del crimen de Girona
La policía trabaja con la hipótesis de un ajuste de cuentas entre mafias del Este
La investigación policial del triple crimen cometido el pasado sábado en una casa aislada de Sant Julià de Ramis (Girona) está centrada en localizar a los inquilinos de la vivienda. Una mujer que hablaba francés, un ciudadano lituano y otro presumiblemente de otro país del Este de Europa ocupaban la casa en alquiler desde el pasado 1 de junio y son, de momento, los principales sospechosos de los asesinatos. Los investigadores están pendientes de que la autopsia aclare las identidades y la causa de las tres muertes. Los cadáveres aparecieron calcinados en el jardín de la vivienda. La policía trabaja con la hipótesis de un ajuste de cuentas entre mafias de países del Este, aunque no se descartan otras posibilidades.
Los cadáveres fueron localizados en un agujero de poca profundidad, bajo los rescoldos de un incendio de palets y material de deshecho. Una columna de humo fue divisada en la mañana del sábado por una patrulla de Tráfico, que avisó a los Bomberos para evitar que el fuego prendiera en la arboleda cercana. Los agentes llegaron a ver a un hombre al lado del fuego. Éste, desde lejos y por señas, les comunicó que tenía la fogata bajo control. Tras el hallazgo de los cuerpos, se hizo evidente que ese individuo, que huyó, podía ser uno de los asesinos. Los tres cuerpos estaban semicalcinados y tenían indicios de violencia. Las víctimas posiblemente fueron asesinadas a tiros. Una de ellas apareció maniatada.
Los inquilinos de la vivienda no despertaron sospechas a su propietario ni a la inmobiliaria que se ocupa de los trámites. La mujer del grupo, que hablaba francés pero que podría ser polaca, llevaba consigo un bebé y un niño de entre 6 o 7 años. Se da la circunstancia de que la noche del viernes, los inquilinos pidieron al propietario de la vivienda de que no se acercara por la zona porque tenían invitados. La vivienda se encuentra situada en una zona aislada cercana a dos transitadas vías de comunicación y sometida al ruido del tráfico.
La policía autonómica descartó desde el primer momento que el suceso pueda relacionarse con los robos violentos a viviendas que han tenido lugar en los últimos meses en el término municipal de Sant Julià de Ramis.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.