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Columna
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Convención de morros largos

No todo está en los libros, no todo está en los libros. Todo está en las obras, todo está en las obras. En las obras de Terra Mítica está el sobrecoste y sus consecuencias, según el estribillo de moda del presidente Camps. El presidente Camps se echó un capotazo, echándoselo al ex presidente Zaplana, pero luego lo dejó para vestir teogonías de feria. Vestir teogonías de feria y andar entre el presunto cobro de secretas comisiones es oficio propio de ¿políticos? con la puerta pegada a las narices y en trance de prejubilación. A Eduardo Zaplana le han pegado con la puerta de la convención regional del PP en las narices, pero el grito de dolor lo ha puesto José Joaquín Ripoll, presidente provincial de los populares, en Alicante. Eso es empatía y que le quiten lo morao. Pero empatía no solo como identificación emocional, sino como identificación nasal, que ya es hasta lírico: éranse dos conservadores a una misma nariz pegados. Así, se explica que Ripoll haya dicho que Zaplana debería estar presente en la convención, que se escenifica en Valencia, por muchas razones: es un valor positivo, que aporta fortaleza y unidad, y si no que se lo digan a él. Pero Ripoll, de militancia rigurosa, se ha cuadrado, sin embargo, ante la superioridad y ha dicho que él y los suyos son disciplinados, pero no tontos -lo que no deja de ser una opinión-, y que acata, pero discrepa. El también presidente de la Diputación alicantina anda mosqueado. El campismo, a la hora de elaborar las candidaturas relevantes, ha dejado en la cuneta a los más conspicuos representantes del zaplanismo. Una jugada que permitirá decidir al comité electoral regional, suscitado por el ejecutivo que lidera Francisco Camps, las listas para las Cortes y los municipios de 20.000 habitantes, para arriba. Por Alicante, en ese comité, tienen plaza Miguel Barceló y María Teresa Revenga, contra la que el dirigente popular provincial no ha mostrado empacho alguno en aventurar graves descalificaciones: "Ha participado en cuatro elecciones locales y las cuatro las ha perdido, no parece que sea la mejor conocedora de la realidad del partido". Si la realidad del partido es la realidad virtual a la que se refiere Ripoll, desde luego que no. Pero con tales descalificaciones, no va a impedir que el sector del PP, en el que ha echado raíces y narices, se vaya al garete. Camps tiene bien cogidos a sus adversarios más próximos, aunque no más prójimos. En esa guerra, que desgasta a unos y otros, y que ya ha dinamitado gran parte de su organización, el presidente regional les ha tomado la delantera, y colocará en los puestos de salida a sus fieles. Hoy, de acuerdo con el programa, cerrarán la convención, donde Camps se proclamará candidato a la Generalitat, el propio Francisco Camps y Mariano Rajoy. Y habrá muchos morros largos. Como aquella noche, que hubo muchos cuchillos largos y que los SS se cepillaron a sus compañeros de las SA. Truculencias de nazis y qué tendrán que ver los señores de ahora, con aquellos señores de entonces, ¿o no?

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