A por las novias del mundo

La firma de moda nupcial Rosa Clará no para de crecer. Desde que abriera su primera tienda en Barcelona, hace ya 11 años, el grupo catalán ha inaugurado otros 48 locales en España, dos en Portugal y tres en México. Ahora, después de aprobar un plan de expansión que abarca los próximos 10 años, su principal objetivo es consolidarse en el mercado internacional. Para ello, a lo largo del próximo año abrirá nuevas tiendas en París, Santo Domingo y Moscú. La firma también ha fichado al prestigioso Karl Lagerfeld, que diseñará una de sus colecciones.Además de su red de establecimientos propios, la firma de moda nupcial cuenta con más de 1.000 puntos de venta en países como Italia, Bélgica, Holanda, Alemania, Estados Unidos y Japón. "En España tan sólo nos quedan por abrir seis o siete tiendas más", calcula la fundadora del grupo, Rosa Clará. "A partir de ahora", explica, "empezaremos el crecimiento internacional con la inauguración de nuevos locales". La primera ciudad escogida ha sido París. Una vez conquistada la capital francesa, "podremos abrir tiendas donde queramos", sostiene la diseñadora.

La firma apuesta por la personalización de todos sus trajes de novia, que desde su confección "llevan nombre y apellido", apunta Clará

Lo cierto es que el nombre de Rosa Clará empieza a sonar con fuerza en todo el mundo. Recientemente ha recibido el Premio Ciudadano Europeo 2005, en reconocimiento a su contribución por globalizar Europa. Sea como fuere, su espectacular crecimiento ha ido de la mano del que ha registrado el sector de la moda nupcial español, que ya es el segundo exportador mundial de trajes de novia, sólo por detrás de China, según un informe del Instituto Español de Comercio Exterior (ICEX).

Ahora mismo, este mercado cuenta con 500 empresas en España y su facturación total supera los 300 millones de euros anuales, según los últimos datos del ICEX. La facturación del grupo Rosa Clará en 2005 rondó los 20 millones de euros, un 23% más que en el ejercicio anterior

Para sobresalir entre tanto competidor, la firma catalana ha apostado desde el principio por "la calidad" de sus diseños, subraya Clará. Por eso, a pesar de consolidarse como una de las principales empresas de su sector, el proceso de producción de Rosa Clará sigue fiel a la personalización de todas sus prendas.

"No compramos un metro de tejido ni se pone en fabricación un solo vestido que no lleve el nombre y el apellido de la novia", explica la diseñadora catalana. De esta forma, por muchas tiendas que inaugure, se impide la masificación del producto. Incluso cuentan con una base de datos -con la información de la iglesia y del restaurante donde se celebrará la boda- para evitar que coincidan dos novias vestidas de Rosa Clará.

Para garantizar la calidad final de sus nueve colecciones nupciales -cuyos precios por prenda oscilan entre los 1.300 y los 6.000 euros-, Clará asegura que la deslocalización de la producción hacia países con mano de obra más barata es "absolutamente impensable". Así, la firma de moda nupcial, que cuenta con 90 trabajadores fijos y cerca de 1.000 subcontratados, continuará produciendo sus vestidos en la sede del grupo, ubicada en l'Hospitalet de Llobregat (Barcelona).

Rosa Clará, por otra parte, acaba de firmar un acuerdo de licencia con el prestigioso creador alemán Karl Lagerfeld para que diseñe una colección exclusiva de vestidos de novia. "Se trata de un acuerdo muy importante", señala Clará, "puesto que Lagerfeld, ahora mismo lo máximo en el mundo de la moda, nos ha tenido en cuenta como empresa, valorando sin ninguna duda la expansión que hemos tenido, así como la calidad de nuestros productos y la exclusividad de nuestros puntos de venta".

Además de Lagerfeld, Rosa Clará también ofrece los diseños de otros reconocidos creadores, como el español Jesús del Pozo o el francés Christian Lacroix.