Otros 24 sueños rotos

La tripulación del buque hospital Esperanza del Mar rescató ayer 24 cuerpos que flotaban sin vida a unas 70 millas (unos 126 kilómetros) de Cabo Blanco (el fragmento de territorio donde se encuentra Nuadibú, la ciudad fronteriza al norte con el Sáhara) y más de 388 millas (unos 700 kilómetros) al sur de las Islas Canarias.

Los cuerpos flotaban por efecto de los chalecos salvavidas que vestían sobre ropas impermeables, y uno de ellos también portaba un sistema de localización por satélite (GPS). Hace apenas 10 días aparecieron de golpe otros 45 cadáveres en el mismo punto. Otros 123 inmigrantes sí alcanzaron las costas del sur de la isla de Tenerife durante la jornada de ayer y cumplieron parte de su sueño. La decepción llegó cuando los voluntarios de Cruz Roja les informaron de que serían repatriados, que son irregulares, y que han sido víctimas de un engaño.

Los cuerpos sin vida fueron hallados en varias tandas tras horas de rastreo. Por la vestimenta y el lugar donde se encontraban es de suponer que se trata de parte de la tripulación de una embarcación de inmigrantes subsaharianos que horas antes había partido de Nuadibú con la intención de navegar los casi 1.000 kilómetros de distancia hasta algunas de las islas Canarias. Otras dos canoas con 123 varones adultos sí arribaron ayer a Tenerife, tras cinco días de navegación.

Hace apenas un mes, el Esperanza del Mar desembarcaba en Gran Canaria a 71 inmigrantes que viajaban sin rumbo en una patera de apenas 13 metros, frente a las costas de Mauritania. El hospital flotante, dependiente del Instituto Social de la Marina, navega más de 300 días al año a lo largo de la costa de Senegal, Mauritania y el Sáhara, para prestar asistencia médica a más de 300 pesqueros españoles y casi 5.000 tripulantes

En muy pocos días se han superado las 1.600 plazas en los centros de internamiento de extranjeros en las islas. El Ministerio de Defensa habilitó ayer un cuartel abandonado en la zona de Las Raíces (La Laguna), frente al aeropuerto de Los Rodeos. Esta instalación tiene 500 plazas de capacidad y ayer ya se ocupó con 83 subsaharianos.

El presidente del Gobierno de Canarias, Adán Martín, convocó un gabinete de crisis

. Ante la alarma generada los últimos días entre la población, el presidente Adán Martín hizo un llamamiento a la Administración central para que incremente las derivaciones a la Península de extranjeros que no han podido ser repatriados. El portavoz del Grupo Coalición Canaria-Nueva Canarias en el Congreso, Paulino Rivero, presentó ayer una pregunta al ministro de Interior sobre el mejor control de las fronteras insulares.