La entelequia del rock de ahora
Estética y musicalmente anclados en el rock de los años setenta, los escandinavos The Soundtrack Of Our Lives ofrecieron el martes por la noche en Madrid un enjundioso concierto para celebrar sus 10 años de vida y la buena acogida que está teniendo su último disco, el recopilatorio titulado A present from the past.
Liderada por el voluminoso cantante Ebbot Lundberg, que apareció con melena, barba y ataviado con una de esas camisas anchas a lo Demis Roussos, la banda atacó un repertorio compacto en el que el poderío guitarrero, los ácidos teclados y una base rítmica de las que no fallan un compás fueron marcando el camino a seguir.
Psicodelia, rock duro, punk y pop de irregulares melodías se combinaron en un repertorio cuyos temas parecen las caras B de los grandes nombres del rock de la década citada.
The Soundtrack Of Our Lives + Sloan
Sala Divino Aqualung. Madrid, 24 de enero.
Ecos
Innegables ecos de The Who y los Rolling Stones pueblan en sus riffs, sus arreglos de órgano y el desarrollo instrumental de unos temas que no temen ser lo largos que la expresión y el desarrollo de la idea musical necesiten.
Entre las canciones propias, Galaxy, Big time y 21st century marcaron los picos de un concierto que resultó entretenido. Entre los temas ajenos, el más interesante de la noche fue la versión que la banda hizo de la no muy conocida versión de la canción de The Stooges I'm sick of you, propio y acertado para una de las bandas que mejor fagocita las influencias del rock de siempre para servirlas como algo nuevo, propio y actual. La entelequia, en fin, del rock de ahora.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.